El Correo de Burgos

Roba joyas a una anciana e intenta venderlas en tiendas de compraventa de oro en Burgos

El botín sustraído a la víctima, de 78 años, superaba los 4.250 euros

Joyas robadas y puestas a la venta en Burgos.GUARDIA CIVIL

Burgos

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La Guardia Civil de Burgos detuvo recientemente a una persona de 19 años de edad como presunta autora de un delito continuado de hurto de joyas en el interior de un domicilio ubicado en la comarca de Arlanza

Los hechos fueron puestos en conocimiento de la Benemérita a finales del pasado mes de enero. La denunciante y víctima, de 78 años de edad, comunicó que desde el pasado mes de junio y hasta entonces, había notado la falta de numerosas joyas de oro que guardaba en su domicilio.

Al principio, pensó que las había extraviado. Sin embargo, según se iban sucediendo las desapariciones empezó a sospechar que lo que realmente estaba sucediendo es que alguien las estaba sustrayendo. Aun así, en ningún momento relató que se observaran signos de forzamiento ni estancias revueltas.

Así arrancó la Operación Riberjosi, a cargo de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de Burgos en el marco de Plan Mayor de Seguridad. De esta forma, se inició una profunda pero discreta investigación, por la especial sensibilidad, indefensión y vulnerabilidad del colectivo afectado, al que la Guardia Civil presta una especial atención y protección.

Fruto de las primeras indagaciones, la investigación se centró en el entorno más próximo de la víctima. El seguimiento de las joyas llevó a recorrer diferentes establecimientos de compraventa de oro, localizando en tres comercios de la capital varias anotaciones en relación a la adquisición de las joyas, similares a las denunciadas por la propietaria, por valor superior a los 4.250 euros.

La rápida y determinante iniciativa de los investigadores, tras un arduo trabajo de análisis, permitió localizar siete objetos de oro -concretamente dos cadenas de cuello, dos colgantes, dos anillos y una pulsera- que casaban con las características de las piezas denunciadas como sustraídas y que más tarde fueron reconocidas como propias por la denunciante.

Las pesquisas llevadas a cabo se centraron finalmente sobre una persona del entorno más próximo a la víctima que se aprovechó de su confianza y vulnerabilidad para cometer varios hurtos en el domicilio.

Cabe destacar la complejidad que entraña el esclarecimiento de este tipo de ilícitos por la dificultad en el seguimiento de los objetos sustraídos, por lo que resulta fundamental la rápida respuesta de los investigadores para localizar las joyas sustraídas, ya que su destino final suele ser la fundición del oro, despareciendo para siempre, lo que obstaculiza, más si cabe, su seguimiento.

Finalmente, las diligencias instruidas han sido presentadas en el Juzgado de Instrucción de Lerma.

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