San Pedro ya tiene a sus reinas

En una tarde noche de emoción en la despedida de la anterior Corte Real, y muchos nervios y emoción en la recién nombrada, Burgos conoció a las que serán sus nuevas Reinas, Mayor e Infantil, entre los aplausos y vítores de un entregado público en el Teatro Principal. Alba Patús Álvarez, del Club Ciclista Burgalés, fue nombrada Reina Mayor, y Celia Díez González su homónima en la categoría Infantil. Alba tiene 22 años y cursa su último curso de Enfermería, confesaba aún muy nerviosa tras su nombramiento. «Le he preguntado a Lara (una de las Damas) si había dicho mi nombre de verdad, no me lo esperaba», confesó. Destacó la Ofrenda de Flores y el Pregón como sus preferencias de cara a las próximas Fiestas de San Pedro y San Pablo, y subrayó que este año vivirá los festejos «de una forma muy diferente» y con «el orgullo de representar a mi ciudad». También quiso aprovechar la ocasión para invitar a los burgaleses a que «se animaran a salir a la calle, y no sólo en estas fechas sino también en otros tipos de eventos». Por su parte, la Reina Infantil estudia, a sus nueve años, en el colegio Círculo Católico, y se declaró aficionada a «patinar, las manualidades y la gimnasia artística», y, como no podía ser de otra manera, a las danzas. Para ella, las Fiestas «serán muy especiales» porque «es un honor» representar a la ciudad. Como mensaje a los burgaleses se limitó a exclamar un «¡Viva Burgos!», y aseguró que su parte favorita será «la Ofrenda de Flores». Junto a las Reinas, la Corte Infantil la completarán durante este año las Damas Carla Cordero Oviedo, de la Asociación de Danzas Estampas Burgalesas; e Inés del Val Vivar, de la Sociedad Recreativa Castellana. En su homóloga Mayor, acompañarán a Alba, Lorena Sanmartín Fuente, de la peña Burgosalsón; Jenifer Manrique Calleja, de la peña Chamarileros; Melisa Costa Santamaría, de la Asociación de Danzas Estampas Burgalesas; y Lara Rincón Ausín, de la peña Colón. Previamente, la anterior Corte Real, que pondrá punto y final a su reinado con su aparición pública en el Curpillos como último acto, hizo balance de lo que ha sido este año tan especial y en el que han compartido vivencias y experiencias que, según confesaron, «serán para toda la vida». La emoción hizo acto de presencia en el escenario cuando, mientras su discurso, la todavía Reina Mayor, Beatriz Saiz Domingo, no pudo contener las lágrimas en varias ocasiones y fue animada por la ovación del público que la dio el empujón final para completar su repaso por todas las aventuras acontecidas mientras portó la banda que distinguía como representante real de la ciudad.