La embajadora de Haití agradece en Miranda la solidaridad con su tierra

GABRIEL DE LA IGLESIA / Miranda

El salón de plenos del Ayuntamiento de Miranda se vistió ayer de gala para acoger a un visitante de excepción: la embajadora de Haití en España, Yolette Azor-Charles, quien se trasladó hasta la ciudad del Ebro para agradecer en primera persona la solidaridad demostrada por los mirandeses tras el terremoto que asoló el país caribeño hace apenas unos meses.

Y es que, las campañas emprendidas en Miranda por el Rotary Club y Cruz Roja han obtenido una recaudación de unos 72.000 y 20.000 euros respectivamente. A esta cifra hay que añadir los 20.000 euros aportados por el Ayuntamiento a través de los fondos de cooperación.  Todo ello, puntualiza el primer edil, «en un tiempo record».

Según apuntaban ayer todos los presentes, se trata de una de las cifras más altas (teniendo en cuenta la población de la ciudad) de las registradas en España, que a su vez es uno de los países que más está aportando para la reconstrucción de Haití. En este sentido, Campo subraya que «Miranda siempre ha sido una ciudad muy solidaria, con Haití y con otra gente siempre que ha habido problemas» de esta magnitud. «El corazón de los mirandeses ha hablado», resumía el alcalde en un texto redactado de manera específica para la ocasión.

Ante esta tesitura, Azor-Charles no pudo más que ofrecer su gratitud a los mirandeses en nombre de todos sus conciudadanos. "Gracias es una palabra pequeña, pero llena de sentido y sentimientos", manifestaba. 

Eso sí, todavía queda mucho por hacer en Haití. En este sentido, la embajadora participó en una charla organizada por la tarde en la Casa de Cultura en la que detalló algunas de las necesidades más urgentes. Entre estas necesidades destacan la distribución de agua potable a toda la población o la disposición de un 'techo' para los supervivientes. En esta línea, Azor-Charles no dudó en hacer un «llamamiento» para que el «compromiso» demostrado durante los últimos meses no se quede en el olvido.

Varios años

De momento, las autoridades haitianas han calculado que tendrán que pasar varios años antes de poder volver a la normalidad. En este sentido, Azor-Charles explica que el Gobierno de la república caribeña ha establecido un plan de acción que se alargará durante los próximos 20 años, si bien, todavía se desconoce si surtirá el efecto deseado. Y es que, la reconstrucción del país deberá ordenarse y lidiar con los habituales huracanes y lluvias torrenciales que asolan anualmente esta zona del Caribe.

A pesar de que «es un desafío enorme», las autoridades haitianas siguen confiando en las posibilidades de futuro. No en vano, según señala Azor-Charles, Haití es ahora mismo «una tierra de oportunidades de negocio» abierta a la inversión internacional.