El Correo de Burgos

SANIDAD

El PSOE hará una campaña para que la Junta rescate la concesión del hospital

Ángel Olivares advierte de que cuanto más se tarde en recuperar la gestión «más perjuicios sufrirá la sanidad pública de Burgos» y considera que la concesionaria no pondrá trabas

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Burgos

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/ BurgosEl PSOE se apoya en la sanidad para menguar la fortaleza y hurgar en una llaga que no se cierra para el PP de Burgos. Ángel Olivares anunciaba ayer el desarrollo de una campaña cuyo objetivo es movilizar a la ciudadanía y forzar al Gobierno regional al rescate de la concesión al sector privado de la gestión del nuevo hospital.Olivares alude a la «tremenda preocupación» del personal sanitario que será el responsable directo de la gestión médica del nuevo hospital por la ausencia de consultas sobre las decisiones que se adoptan ni sus opiniones son tenidas en cuenta. «El personal facultativo percibe que se camina hacia un desastre de gestión».«Cuanto más se tarde en rescatar la concesión del hospital, más perjuicios va a sufrir la sanidad pública burgalesa», advierte Olivares. Argumenta que será así porque se prestarán los mismos servicios médicos que ahora «pero con menos calidad y mucho más caros».Los socialistas han criticado siempre que la Junta de Castilla y León optara por un modelo de concesión de obra pública al sector privado para financiar el nuevo complejo sanitario de Burgos que sustituirá al Hospital General Yagüe. Esta fórmula conlleva que la sociedad adjudicataria asume la inversión y la ejecución de la obra civil y también la gestión de catorce de los servicios del futuro centro médico que se consideran no asistenciales. También asume la explotación de aquellas zonas comerciales con que se dote a las instalaciones sanitarias.El compromiso adquirido por la Junta de Castilla y León es el abono a la entidad adjudicataria una vez finalizada la construcción del inmueble un canon anual que ronda los 36 millones de euros durante un plazo de 27 años. El coste de la ejecución del proyecto -es decir, sólo la construcción del complejo de edificios- se valoró en poco más de 240 millones de euros.La campaña que proponen los socialistas burgaleses incluye el impulso de iniciativas parlamentarias, en los ámbitos locales y provinciales, artículos de opinión, fomento del debate y movilizaciones ciudadanas. Se trata de «comunicar a todos los burgaleses la gravedad del problema que estamos viviendo», resumía.A su juicio, las ventajas con las que argumentó la concesión al sector privado tanto la construcción como la gestión posterior del complejo sanitario «se derrumban poco a poco». Olivares considera que la población atesora ya datos suficientes para comprobar que el sistema ni abarata costes ni mejora la gestión. Lo que se necesitan son buenos gestores, públicos o privados, pero desde luego los públicos son muy malos gestores», asevera.La campaña abarcará los ámbitos político y social con el objetivo de que la preocupación que se expresa desde el sector sanitario en Burgos cale en la opinión pública.  Olivares alude a que una decisión de la Junta de Castilla y León para el rescate del hospital «es hoy mucho más barata de lo que será en el futuro, además de mucho más eficaz para la sanidad burgalesa».El PSOE, manifiesta Olivares, tiene la seguridad de que la empresa concesionaria -una Unión Temporal de Empresas (UTE)- no obstaculizaría la operación. Aludió a que muchos de los profesionales de la Junta Técnico-Asistencial que asistieron a una reunión este pasado martes con el gerente regional de Sacyl, José Manuel Fontsaré, en la que se trataron asuntos relacionados con el nuevo hospital prefiere, al término de la entrevista, «quedarse donde está».El portavoz del Grupo Municipal  Socialista critica también el oscurantismo con que se adoptan muchas decisiones relativas al nuevo hospital. «Nadie sabe lo que se está haciendo», señala, «y lo poco que se sabe es tremendamente preocupante».

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