Burgos pierde 10,5 millones de litros de agua potable al día en dos fugas

BurgosLa red de abastecimiento de agua potable de la ciudad está perdiendo 10,5 millones de litros diarios sólo en dos fugas. Las tareas de sectorización de los 500 kilómetros de tuberías que discurren por el municipio han permitido detectar estos escapes, pero no son los únicos, aunque sí se hallan entre los más importantes.Ambos se encuentran en las inmediaciones de la carretera de Logroño; uno junto al río y cerca del club El Soto y el otro en La Ventilla, bajo la carretera de Logroño y suponen una pérdida de unos 60 litros por segundo cada uno, según la presidenta del Servicio de Aguas, Dolores Calleja. El Ayuntamiento tendrá que pedir ahora autorización al Ministerio de Fomento para levantar parte de la N-120 a su paso por el barrio de La Ventilla y proceder a la reparación de esta fuga, que está localizada bajo la calzada.«Necesitamos el permiso para organizar la obra, porque es posible que suponga cortes de tráfico», explica la concejal responsable del servicio, Dolores Calleja.Sin perder de vista esta anomalía, el Ayuntamiento sigue trabajando en el análisis de la red de abastecimiento en busca de nuevas incidencias a través del proyecto de sectorización que inició el año pasado.Los primeros trabajos han servido para detectar problemas de distinta magnitud en los diferentes sectores en los que se ha dividido la red de abastecimiento para su control y mantenimiento.También Fuentes BlancasLas primeras tareas de sectorización han señalado también la existencia de fugas importantes en un punto del sector Fuentes Blancas. Estas tres incidencias son las de mayor gravedad que ha detectado el Servicio, que está trabajando en la implantación del control telemático de la totalidad de la red.El Consistorio tendrá que determinar ahora si esas fugas que se han detectado «simplemente por las diferencias de presión que se han comprobado en esos sectores» se deben a la rotura de una tubería, apunta Calleja. La respuesta llegará en el momento en el que los técnicos procedan a la reparación. De momento, están ocupados en la localización de problemas en unas tuberías que, hasta la fecha, sólo han revelado la existencia de problemas en forma de reventones y socavones. El proyecto de sectorización permitirá al Ayuntamiento prevenir su aparición, porque alertará de la existencia de anomalías a través de un sistema telemático.El Servicio de Aguas tendrá que esperar unos meses todavía para telematizar el circuito. Mientras tanto, los técnicos siguen escudriñando el estado de la red y ya han puesto de manifiesto la existencia de «anomalías» en varios sectores de la ciudad. En la actualidad están implantando los correladores que permitirán localizar con precisión las averías.