Reconocimiento al valor cívico

L. B. / Burgos

«Una evocación de años críticos y un reconocimiento al heroísmo y al valor cívico de tantas y tantas personas que consiguieron que hoy podamos reconocer a España en su actual configuración». Con estas palabras definía el alcalde de la ciudad, Juan Carlos Aparicio, el mural que desde ayer luce en la plaza de España como homenaje a los burgaleses que lucharon en la Guerra de la Independencia, a aquellas gentes que un día como hoy hace más de dos siglos se rebelaron contra la invasión napoleónica, «adelantándose incluso a la conocida sublevación de Madrid», apostilló el primer edil.

Y así, con estas palabras, al son de la Marcha Radezky, ante diversas autoridades civiles y militares y al abrigo de la lluvia que protagonizó la mañana se descubría al público la obra de cerámica con acabado metálico del artista cántabro Juan José Fernández Revuelta, «que refleja con gran plasticidad el esfuerzo heroico de la ciudad», subrayó Aparicio.

El acto contó con la presencia de dos unidades de recreación. Una, local, la Asociación de Amigos del Museo Militar de Burgos, que portaban uniforme de Infantería de línea del Regimiento de Infantería de Burgos. Otra, visitante, la Asociación de Amigos del Museo de Historia Militar de Valencia en uniforme de granaderos del Regimiento de Infantería de Valencia y uniforme del regimiento 51 de Infantería de línea francés.

Hoy seguirán los fastos en recuerdo de aquella revuelta popular con la recreación del amotinamiento en el que se produjeron los fallecimientos de los héroes burgaleses.

A las 12.30 horas, el Marqués de la Granja se trasladará escoltado por tropas españolas y abucheado por el pueblo desde la Plaza Mayor a la Catedral. En la plaza del Rey San Fernando las tropas francesas reforzarán la escolta del noble ante la presión popular desembocando en un enfrentamiento que finaliza con descargas de fusilería.