El Correo de Burgos

HUELGA EN EL SECTOR PÚBLICO

Miles de burgaleses afectados por el paro total de autobuses

El Ayuntamiento suspendía el servicio «para prevenir males mayores» ante posibles incidentes anunciados por el piquete

-

-

Burgos

Creado:

Actualizado:

L. B. / N. E. / Burgos

Ningún autobús municipal recorrió ayer las calles de la ciudad. Su ausencia se convertía así en la consecuencia más visible de la huelga del sector público. El Ayuntamiento de Burgos tomaba la decisión de anular todos los servicios de transporte urbano con la intención de prevenir incidentes de gravedad que afectaran a los trabajadores o a los miles de ciudadanos que utilizan este medio para desplazarse.

Según el concejal responsable del área de Movilidad, Esteban Rebollo, la intención era «prevenir males mayores» pues el piquete informativo, integrado por unas 20 personas, que se desplazó a las cocheras del servicio a primera hora de la mañana con el ánimo de impedir las salida de los vehículos a pesar de la presencia policial dejó caer que estos podrían sufrir algún accidente si circulaban.

«El temor de los inspectores de línea a que así fuera nos obligaba a suspender los servicios mínimos que pretendían cubrir los trayectos a hospitales, centros sociales o zonas más distantes», reconocía Rebollo, que confesaba su malestar por la situación. «Todo el mundo tiene derecho a protestar pero no puede hacerlo causando molestias de este calado a sus conciudadanos», opinaba.

Los autobuses urbanos registran una media de 35.000 'movimientos' diarios. La idea inicial, publicitada con antelación en la web municipal, era reducir los 53 vehículos que habitualmente cubren las 32 rutas existentes a 21 para recorrer 17 trayectos con una frecuencia menor a la normal, de hasta 80 minutos. De los 156 conductores, 38 estaban llamados a asumir esta oferta mínima.

El rechazo de los sindicatos a estos servicios mínimos al considerarlos abusivos -aunque, según recordó Gema Conde, concejal de Personal, estaban pactados con el comité- originaba esta protesta que derivó en una suspensión que a primeras horas sembraba el desconcierto entre los usuarios. Y es que a pesar de que los paneles informativos anunciaban la cancelación de todas las líneas a causa de la huelga, centenares de burgaleses aguardaron en las paradas hasta confirmar la ausencia de autobuses. Fue entonces cuando la mayoría hizo uso de los taxis, que no daban a basto o se resignaron a caminar hacia sus destinos.

Valoración

Los sindicatos convinieron que este paro suponía un «éxito» pero rechazaron cualquier responsabilidad y la presencia continuada de piquetes. «Lo han decidido los concejales por su cuenta y riesgo y lamentamos las molestias causadas», sentenció el representante de UGT, Joaquín Porres.

tracking