La Feria de Tapas vuelve a fijar el inicio masivo de las fiestas

M.R. / N. V./ Burgos

Sin solución de continuidad al chupinazo que marcaba el comienzo de las fiestas de SanPedro, la Feria de Tapas abría sus puertas por sexto año consecutivo para volver a dejar constancia de que ha sido y sigue siendo una de las principales citas de San Pedro y Pablo. Una marabunta sedienta se apostó junto a las casetas de la Plaza Mayor nada más inaugurarse las fiestas, apenas minutos antes de la hora de apertura oficial de la Feria de Tapas.

Entre los más impacientes por saborear las delicias elaboradas por los hosteleros burgaleses se encontraban también el alcalde y el concejal de Cultura y Festejos, Diego Fernández Malvido, que no perdieron el tiempo y se dirigieron a la caseta más próxima al Ayuntamiento.

Aunque el cielo gris amenazaba con tormenta, las 48 casetas desplegadas por la Plaza Mayor, Plaza deEspaña, General Santocildes, Plaza de Santo Domingo, Alonso Martínez, Plaza de la Libertad y en el corazón de Gamonal, en la Plaza de Roma. La Feria también se pudo disfrutar en los seis establecimientos que este año han decidido apuntarse pero sin caseta, ofreciendo su servicio a la puerta de sus locales, como el 22 Vinos y Tapas, el 24 de la Paloma,Restaurante Manrique, Cibercafé Cabaret, La Comidilla de San Lorenzo y Buenas Migas. Así que serán en total 58 establecimientos los que ofrecen desde ayer pinchos fríos y calientes. Por si es la primera vez que acude a la feria de tapas, debe saber que la tapa de concurso más una bebida le costará 2,20 euros. Eso sí, como la crisis sigue acuciando, aún más si cabe que en las fiestas del pasado, estos 2,20 euros se mantienen inalterables respecto al año pasado, ni IVA ni nada añadido que valga. Si hay que aparcar la crisis para disfrutar de la fiesta, como decía en el pregón Octavio Granado, que sea por lo menos al mismo precio que hace un año.

Y podrá elegir entre una fría y una caliente, pasando desde unos huevos rotos con gulas, un chipirón de morcilla, o una brocheta tropical, y así hasta cientos de posibilidades. Si no, hay opción de pedir otro tipo de pincho más de la casa. No hay problema porque hay días por delante.