El MEH y una previsión a la baja del stock salvan la temporada de rebajas

J. MAIQUES / Burgos

Los comercios de la ciudad han encontrado un bote salvavidas en el Museo de la Evolución Humana (MEH). Al menos, esa es una de las explicaciones que mantienen desde la Asociación Empresarial del Comercio Textil y Complementos (Acotex) para explicar el incremento de las ventas en la temporada de rebajas respecto a las mismas fechas del año pasado. El otro argumento que manejan para explicar que se haya dado salida a casi todo el género ha sido la previsión de contar con un stock más realista y limitado que en años anteriores. Ahora, sólo esperan poder rematar la faena y, a una semana de que finalicen, ya cuelgan de sus escaparates descuentos que, en algunos casos, alcanzan el 50% y hasta el 70%.

Con todo esto, el clima de optimismo, aunque moderado, retorna a uno de los colectivos más castigados por la crisis. Quizá por esto, la presidenta de Acotex, María José González, relata ilusionada que durante estos meses «ha habido movimiento en la ciudad. Quieras que no, si han pasado más de 50.000 personas por el MEH, se nota. Se ha visto ambiente en la calle y por lo menos no ha sido la ciudad desierta que se ha visto en otros veranos».

Y es que, González todavía tiene en la memoria la nefasta temporada de rebajas del año pasado. Una experiencia que ha motivado que muchos comerciantes decidieran, con acierto, curarse en salud y hacer un pedido más modesto que el de años anteriores. «Hemos comprado menos porque, con la que está cayendo, no quedaba más remedio. También es cierto que quedarte sin nada ha sido más fácil que otras veces», explica.

Sin agobios

En cualquier caso, lo cierto es que la mejora en las ventas ha sido moderada y los comerciantes han trabajado sin agobios. Más aún, en una ciudad en la que las rebajas invernales tienen mejor acogida que las veraniegas. En este sentido, la presidenta de Acotex, María José González, explica que «no ha habido grandes aglomeraciones pero hemos ido poco a poco y pienso que, al final, el balance es positivo. Creo que hemos conseguido vender la inmensa mayoría de nuestros productos».

Y es que, otra de las señales que dan fe de que las ventas han sido mejores que las del año pasado se ilustra en que cada vez son más las tiendas que están sacando a sus escaparates prendas de la temporada de invierno. Un situación que, según la presidenta, «es una buena señal», confirma.

De rebajas en rebajas

Otra de las circunstancias con la que los comerciantes han tenido que aprender a convivir ha sido el parón que se produce en las ventas en el periodo comprendido entre la temporada de rebajas de invierno y la de verano. En este sentido, González lamenta una realidad tan evidente como inamovible y afirma que «ahora, mucho más que antes, las personas se visten de rebajas en rebajas. Hace años, la gente se compraba casi todo en temporada y en rebajas compraba algo de capricho que se le antojaba. Desgraciadamente para nosotros, esto ha cambiado. Gastan muy poquito en temporada y hacen el gasto mayoritario en rebajas. Nos gustaría que fueses de otra forma, pero hay que reconocer que es así».

Entre tanto, la incertidumbre sigue siendo una constante entre los comerciantes porque, sin ir más lejos, a más de uno le va la vida en ello. Por un lado, confiar en que el empujón del MEH se consolide y no sea algo temporal y, por otro que termine la cascada de cierre de establecimientos desde el inicio de la crisis. «Sigo viendo liquidación por cierre. No hay mucho, pero siempre hay. Creo que estamos un poco con la expectativa de ver que ocurre con el Museo, de si trae ambiente», añade González.