Villalonquéjar, barrio conectado y renovado
La Ronda Interior Norte permitía 'acercar' esta zona cuya urbanización ha sufrido una mejora integral
Burgos
El barrio de Villalonquéjar, también conocido como Villalón, ha sufrido en los últimos años un profundo lavado de cara. Tanto, que en la actualidad luce totalmente renovado. Lo hizo posible el proyecto de remodelación de infraestructuras que cumplió los objetivos fijados: renovar y mejorar los servicios existentes y reorganizar su vialidad conforme a criterios más actuales, similares a los empleados en otras actuaciones por el Ayuntamiento de Burgos.
Esta reforma hizo especial hincapié en dar una solución a las calles, antes de anchura irregular y con aceras estrechas, y a la pavimentación. Cerca de un millón de euros (el presupuesto del proyecto ascendió a 984.785 euros) lo hizo posible.
Hizo posible restringir el tráfico en calles de hasta siete metros de anchura, facilitando el tránsito de peatones y adaptando los espacios a las normas de accesibilidad y eliminando las barreras arquitectónicas. Tales criterios incluidos en el proyecto inicial obligaron a transformar en calles de sentido único los viales interiores del barrio, dando sentidos de circulación que permitieran acceder a todas las zonas.
Del tráfico precisamente se libraba la plaza Real, recuperada como zona de estancia y ocio y aderezada con equipamiento apropiado que se extendió al entorno de la iglesia.
Más allá de la mejora de la movilidad la reforma integral que ha dado lustre a esta parte de la ciudad implicó además la renovación total de la red de saneamiento y drenaje, la renovación de la red de abastecimiento, la eliminación de los tendidos aéreos de telecomunicaciones y suministro eléctrico, pasando a ser ubicados en canalizaciones subterráneas, más seguras y adecuadas a los tiempos, así como la colocación de nuevos puntos de luz en viales de tráfico y otros espacios.
El remate a este impulso decidido por el barrio de Villalonquéjar, cuya historia, por cierto, se remonta siglos atrás, apareciendo en el censo de Floridablanca de 1787, lo daba la apertura de la Ronda Interior Norte, vial que conectaba la zona al resto de la ciudad. De paso, permitía suprimir la vieja y difícil carretera, que partía desde la próxima barriada Yagüe, por una flamante vía de cuatro carriles que se inauguraba en abril de 2008 como culminación de un proyecto ambicioso del Ayuntamiento de Burgos iniciado en 2005. El gran objetivo era unir los barrios de Villalonquéjar y Villímar a través de una vía de gran capacidad y de varios kilómetros. Conexión realizada.