Detienen al acusado por la muerte de Aitor un año después de fugarse

J. MAIQUES / Burgos

El juicio por la muerte de Aitor del Álamo, que se remonta el 14 de  noviembre de 2009 en la zona de copas de las Bernardas, se podrá celebrar con los dos acusados en el banquillo después de que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado  hayan conseguido dar con el paradero de Marian C., que permanecía fugado y con una orden de búsqueda y captura internacional desde el verano de 2010. Según ha podido saber este periódico, la detención se produjo entre finales de julio y principios de agosto de este año, unos once meses después de que violara la libertad condicional, tras hallar al individuo en una localidad que no ha trascendido de la Costa del Sol.

Así las cosas, y tal y como recoge la ley para este tipo de situaciones en las que existe riesgo de fuga, el detenido permanecerá en prisión hasta la celebración del juicio que, por otra parte, está fijado para los días 3 y 8 de noviembre. Una cita con el juzgado que, de no haber sido por la detención, se tendría que haber realizado con sólo uno de los acusados presentes.

La historia se remonta a principios de 2010, momento en que el procesado ingresó en prisión preventiva y en donde permaneció durante cuatro meses y una semana. Fue en abril cuando el joven, de origen rumano, obtuvo la libertad condicional por la que pagó, debido a la falta de recursos económicos, 1.500 euros. Desde esa fecha, pasó regularmente por los juzgados, tal y como ordenó la juez, hasta que en uno de los meses de verano dejó de visitarlos.

La Fiscalía ya ha solicitado, para él y el otro imputado, Alexandro I., una pena de cárcel de cuatro años y medio. Tres por el homicidio del joven y el resto por las heridas infringidas a otro muchacho en el mismo incidente ocurrido esa misma noche. Del mismo modo, también solicita una indemnización de 80.000 euros para los padres de Aitor y de 18.000 para cada uno de sus hermanos.

Cronología de los hechos

Los hechos se remontan al fin de semana del 14 de noviembre de 2009. Ese día Aitor se encontraba de madrugada en la zona de fiesta de las Bernardas cuando medió en una discusión entre dos grupos de jóvenes y entonces, al parecer, recibió un empujón de uno de los acusados. Horas antes, Aitor también podría haber intervenido en otra trifulca con un tercer sujeto. Sin embargo, parece que, en este caso, el juzgado no ha considerado que tuviera trascendencia en los hechos porque no ha imputado a esta persona.

No obstante, la acusación particular solicitó la deducción de testimonio (abrir una nueva investigación) por si los hechos narrados por testigos de otra pelea que Aitor del Álamo mantuvo horas antes con otro sujeto pudieran ser constitutivos de delito.

En cualquier caso, lo cierto es que la fatídica casualidad quiso, además, que el joven rechazara esa misma noche, por dos veces, la atención sanitaria. La primera de ellas ocurrió después de que se personara la policía en la zona de las Bernardas alrededor de las dos de la madrugada y la segunda, después de que un vecino se encontrara a Aitor inconsciente en el portal de su casa.

La triste cronología de los hechos se completa a la una del mediodía del día siguiente cuando un hermano de Aitor se encontró al joven en la cama en estado de coma. Posteriormente sería trasladado al Hospital General Yagüe donde falleció. La autoridad médica determinó, finalmente, que la causa de la muerte fue un traumatismo craneoencefálico.