La falta de compradores obliga a refinanciar el pago de Villalonquéjar
El PSOE alerta de que el plazo para abonar el primer crédito de la segunda fase de ampliación del polígono se agotó el lunes y tilda la situación de «muy grave»
J. MAIQUES / Burgos
«La situación es grave y lo peor es que se trate de ocultar». En estos términos se expresó ayer la concejal del PSOE en el Ayuntamiento de Burgos Carmen Hernando para dar a conocer la situación de asfixia por la que, según describió, atraviesa el Consorcio de Villalonquéjar. La última noticia, según el relato de la edil, se resume en que el pasado lunes venció el primer pago, de 7 millones de euros, que este organismo tenía que haber abonado a Banca Cívica y al Instituto de Crédito Oficial (ICO) por la financiación recibida para la ampliación del polígono industrial. Un plazo con el que estas dos entidades han querido ser flexibles y por el que han concedido una prórroga extra de dos meses para reconducir la situación.
Sobre este asunto, el vicepresidente del Consorcio, Ángel Ibáñez, reconoció que es cierto que no se ha podido afrontar a tiempo el pago del primer crédito, pero añadió que se trata de una circunstancia normal ya que cuando se concertó el préstamo, hace cinco años, la situación económica pintaba un escenario mucho más optimista que el actual. Sin embargo, y a pesar de los pesares, el también vicealcalde añadió que esto se solucionará con una nueva «refinanciación». Algo a lo que, por otra parte, «se han comprometido a arreglar con ICO desde Caja de Burgos». En este sentido, el edil no aportó más detalles ya que, tal y como señaló, esto lo definirá el ámbito técnico del Consorcio.
En este sentido, y admitiendo las dificultades actuales, Ibáñez quiso recordar que hubo que pedir un crédito de 100 millones de euros para poder ampliar Villalonquéjar (60 para la urbanización y 40 para expropiaciones). Y aquí, señaló que el PSOE estuvo de acuerdo en la inversión que se iba a realizar. «Hubiera sido imposible hacerlo sin el préstamo», señaló molesto con la postura cambiante de la oposición.
Por su parte, el malestar de los socialistas se explica en que si el Consorcio no ha sido capaz de abonar, ni siquiera, el primer pago del crédito, difícilmente podrá hacer frente a los 96 millones de euros que, en total, adeuda este organismo a las entidades crediticias. Y esto, según Hernando, traerá como primera consecuencia que el Ayuntamiento de la capital deberá ser quien asuma la deuda contraída.
Pero, ¿qué es lo que puede hacer el Consorcio para recopilar los siete millones de euros que debe pagar en dos meses? La única opción es la refinanciación ya que la alternativa de que las entidades aceptaran como pago una porción del suelo se antoja imposible. Entre otras cosas, porque estas se convertirán, automáticamente, en competidoras del Consorcio y, en consecuencia, de ellas mismas. Además, deberían aceptar un suelo para el que, en estos momentos, no parece que haya una gran demanda.
Otra opción a descartar sería que el Ayuntamiento aceptara esa parte de la deuda como suya. Algo imposible (salvo que algún día no le quede más remedio) ya que el equipo de Gobierno nunca ha contabilizado la deuda del Consorcio como propia. Además, esto obligaría a tener que renunciar a algunas de las grandes inversiones, y estas son intocables. Por este camino se dirigió ayer Hernando cuando reprochó a Lacalle su empecinamiento por construir, «el Burgos Arena o el teleférico del Castillo», ejemplificó.
Apoyo de Caja de Burgos
Así las cosas, y con este panorama, también cabe recordar la visita que hizo al alcalde el presidente de Caja de Burgos, José María Leal, en el inicio del mandato. En ese momento, el ex rector garantizó que la entidad de ahorro seguirá apoyando el crédito tanto del Consorcio del Ferrocarril como del polígono de Villalonquéjar.