170 vecinos del paseo de Laserna denuncian a San Bruno por estafa
Aún podrían sumarse más. Exigen que el gestor de la cooperativa, Esteban Gutiérrez, les devuelva cerca de 3 millones de euros que se «apropió» como gastos de gestión
L. B. / Burgos
Un paso más y todos a una, o casi; la gran mayoría en cualquier caso. Los afectados por los trasiegos de las VPO de Cellophane, ubicadas en el paseo de Laserna, a la espera de que el Consorcio para la Gestión de la Variante Ferroviaria ultime los trámites que abrirán al fin las puertas de los pisos que en teoría iban a estrenar en diciembre 2008, han denunciado al gestor de la cooperativa San Bruno, Esteban Gutiérrez, por presuntos delitos societario, de estafa y apropiación indebida. Reclaman además el dinero cobrado por gastos de gestión, casi 3 millones de euros.
Hasta el momento 170 exsocios de la citada cooperativa se han sumado a la reclamación aunque la cifra podría elevarse. Los promotores de la iniciativa contactarán con quienes aún no hayan suscrito, 35 según sus cuentas (sin contar los que rechazaron abonar las cuotas previas y si quieren reclamar lo tendrán que hacer por su cuenta), la denuncia para confirmar si prefieren desmarcarse del proceso o por el contrario no han recibido la información.
De hecho, desde la Asociación Paseo de Laserna expresan su confianza en lograr el máximo apoyo. La agrupación se constituyó precisamente para retirar el 'poder' sobre la promoción de viviendas a San Bruno, tras años de retraso en la entrega y polémicas, y buscar una solución.
En la denuncia se relatan los hechos presuntamente constitutivos de delito. El documento hace hincapié en que los denunciados, Esteban Gutiérrez, como representante de Esteban Gutiérrez Mansilla S.L. y los representantes legales de la Cooperativa de Viviendas San Bruno Obispo, «ocultaron a los interesados la realidad de su relación contractual con el Consorcio para la Gestión de la Variante Ferroviaria». Los afectados conocieron finalmente los detalles en octubre de 2010 y supieron, según relata la denuncia, que se trataba de un contrato de compromiso de compraventa por un precio superior a 33,1 millones más IVA y que la fecha límite de pago era el 22 de febrero. «Es decir, al tiempo que los denunciados pedían a los interesados la aportación de 62.900 euros para el pago parcial de la vivienda estaba a punto de vencer el plazo pactado para pagar la totalidad del precio», señalan en el documento, que relata con detalle los sucesivos encuentros entre socios y gestores, hasta la resolución de su vínculo.
La denuncia subraya, además de los «graves incumplimientos contractuales imputables a Esteban Gutiérrez Mansilla S.L.», que esta sociedad hizo suyos 2.991.400 euros «detraídos de la cuenta abierta a nombre de la promoción Cellophane de la cooperativa San Bruno».
Cobro «indebido»
Una cantidad de la que según indican los denunciantes se apropió «indebidamente» en concepto de gastos de gestión que, según han considerado siempre los afectados, no realizó. De hecho, en la documentación aportada en la denuncia explican que, aún siendo válido el contrato de gestión, «Esteban Gutiérrez Mansilla S.L. únicamente hubiera debido cobrar el 8% de 9,9 millones», que es la cantidad entregada por esta sociedad al Consorcio para pago parcial de viviendas y locales. Así, los denunciantes esperan que tras «revelarse la existencia de un presunto engaño grave» los denunciados -entre los que, además, según la denuncia, existe clara relación y «conflicto de intereses»- devuelvan el dinero.
Mientras la denuncia se resuelve, continúa la espera. Finalmente todo apunta a que unas 70 viviendas quedarán libres tras rechazar los interesados la nueva fórmula de acceso o por no reunir los requisitos para adquirirlas. El Consorcio sorteará los pisos que queden libres.