El café Espolón instala la terraza sin permiso y la Policía le obliga a retirarla

J. MAIQUES / Burgos

Ver para creer. El hostelero de la cafetería Espolón (antiguo Pinedo) desafió ayer al Ayuntamiento y, pese a carecer de licencia de terraza, sacó las mesas y las sillas a la calle con la intención de hacer negocio en el que, prácticamente, ha sido el primer día del último mes en el que la lluvia no hizo acto de presencia en la capital.

El arrendatario del negocio trató de burlar así la normativa municipal, tal y como hizo reiteradamente en años anteriores, pero se topó con la presencia de la Policía Local que, en cuanto tuvo conocimiento de lo que hacía el empresario, se personó en el establecimiento y le comunicó al hijo de éste (era el que estaba presente en el local) la orden taxativa de que retirara, y de forma urgente, los enseres de la vía pública.

Según pudo saber este periódico por fuentes municipales, el hijo del arrendatario justificó su acción en que la empresa habría solicitado permiso al Ayuntamiento para la instalación de la terraza y, al no recibir contestación, interpretaron a su conveniencia que el silencio administrativo les otorgaba todo el derecho para sacar las mesas a la calle. Una teoría que choca frontalmente con la tesis de la Administración que, tajantes, sostuvieron que esta excusa no tiene razón de ser ya que el silencio administrativo no es aplicable en el caso de la ocupación privativa del suelo de dominio público.

Este periódico fue testigo del momento en que los agentes policiales ordenaban, a la puerta del negocio, la retirada de la terraza al hijo del empresario. Este, al detectar la presencia de un fotógrafo de EL MUNDO-EL CORREO DE BURGOS se apresuró a acceder al interior del negocio.

La visita de la Policía Local a la cafetería Espolón se produjo minutos antes de la una de la tarde. Entonces, el empresario ya había sacado 16 mesas a la calle con sus respectivas sillas, lo que provocó que los agentes levantaran acta de lo allí sucedido. En ese encuentro, el hostelero se comprometió a retirar la terraza antes de las 15.00 horas y ya por la tarde, tras cargarla en una camioneta, había desaparecido del lugar. Ahora, habrá que ver si el Ayuntamiento decide interponer algún tipo de sanción y, de ser así, por qué importe.

En estos momentos, el área de Licencias mantiene abierto el expediente en el que se estudia la petición de la cafetería Espolón para instalar la terraza. Hace apenas unas semanas se pensaba que el Ayuntamiento estaría obligado a otorgar el permiso pero el requerimiento para que abone ahora 44.000 euros en facturas de la luz podría permitir al Consistorio denegar la autorización. Entre otras cosas, porque la normativa municipal deniega la licencia a quien tiene contraída una deuda con la Administración municipal.

El pasado 3 de octubre, la Policía Local ya acudió al local para exigir el desmantelamiento de la terraza después de que el empresario hubiera disfrutado de ella, y sin permiso, durante la primavera y el verano. Tardó más de lo que se había comprometido pero, de madrugada, se la llevó del lugar.