La Inspección de Trabajo estrecha el cerco a las empresas ficticias

M. R. / Burgos

La Inspección de Trabajo, la Policía y la Guardia Civil han creado un grupo específico de trabajo para incidir en un mayor control de las empresas ficticias. Un fenómeno creciente en la provincia, según explicó la jefa de la Inspección de Trabajo, Betina Ruiz Valdizán, tras la puesta en marcha de un convenio que buscará reformar la lucha contra el empleo irregular y el fraude a la Seguridad Social.

Aunque no quiso detallar cuántos casos se han detectado, la jefa de la Inspección de Trabajo habló de la existencia de «expedientes en curso». La creación de este grupo específico está precisamente motivada por la complejidad de este tipo figura delictiva, «un fenómeno nuevo que ha surgido en Burgos en los últimos tres o cuatro años», apuntó Ruiz, quien añadió que «lo estamos aprendiendo». La complejidad radica en que se trata de sociedades que no se crean legalmente, que «buscan dar de alta a trabajadores para obtener prestaciones pero no tienen ninguna actividad real».

El subdelgado del Gobierno, José María Arribas Andrés, explicó que se busca impulsar una colaboración que se inició el pasado mes de mayo y que tiene como principales objetivos luchar «contra el empleo irregular y el fraude a la Seguridad Social». Arribas recordó que la colaboración entre la Inspección y los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado se ha llevado a cabo históricamente, y remarcó que durante el pasado año se finalizaron administrativamente 110 actuaciones, mientras que en lo va de año han sido 39. Junto a la persecución de las empresas ficticias, el subdelegado indicó que el nuevo protocolo servirá para luchar contra la simulación de relaciones laborales en empresas reales, empleo de trabajadores extranjeros sin permiso de residencia y trabajo, irregularidades graves en extranjería, así como tráfico de personas para su explotación laboral. Junto a este trabajo conjunto, en la reunión celebrada ayer se estudió la coordinación para comunicar hechos delictivos a la Fiscalía.  

También se seguirá luchando contra la economía sumergida, que representa en torno al 20% del total. Para ello, la Inspección de Trabajo dispone de diez subinspectores y nueve inspectores.