Arquitectos y aparejadores: menos trabajo pero con seguros más caros
La desaparición de empresas promotoras y constructoras sitúa a los diseñadores y jefes de obra como responsables ante los desperfectos de proyectos subiendo las primas
MARTA CASADO / Burgos
El desplome del sector afecta a todas las capas sociales del proceso constructivo. Nadie es ajeno a la crisis. Grandes constructores se han visto abocados al cierre de sus empresas, a acudir a concursos de acreedores. Los trabajadores e industria auxiliar no levantan cabeza desde 2007. Fueron los primeros en padecer duramente los primeros bocados de la crisis. Pero ahora la burbuja inmobiliaria ha explotado frente a los directores de obra y diseñadores de proyecto. Los arquitectos y aparejadores no son ajenos a este proceso. «Muchos compañeros tiene nóminas sin cobrar y los que ejercen por libre tienen que afrontar cada vez más gastos»; apunta secretario técnico del Colegio de Arquitectos Técnicos de Burgos (Coatbu), Roberto del Amo.
A la situación de falta de actividad, porque ni se proyecta ni se construye, hay que sumar la responsabilidad solidaria ante cualquier problemática de la construcción. Las viviendas tienen tres tipos de responsabilidades que se alargan durante un periodo de diez años. Los desperfectos en los acabados tienen un periodo de vigencia para reclamaciones de un año, pasa a ser de tres en cuestiones de instalaciones y elementos no estructurales y es de hasta diez años para los problemas estructurales que pueda presentar un edificio nuevo. El propietario que ha adquirido el inmueble que «es la gran inversión de su vida tiene derecho a reclamar por lo que ha pagado», argumenta del Amo pero ahora la responsabilidad recae sobre el técnico. «Hay casos en los que las constructoras y las promotoras están en concurso de acreedores o han desaparecido, los periodos de reclamaciones son muy largos y la responsabilidad solidaria que recoge la Ley de Ordenación de la Edificación recae en el técnico que firma el proyecto y ha hecho subir extraordinariamente las primas de seguros de responsabilidad civil», sentencia. La media de los pagos fijos en esta materia que debe realizar un arquitecto o aparejador oscila entre los 2.000 y 3.000 euros al año sólo en primas de seguros en el peor momento que se recuerda.Más información en edición impresa