El Correo de Burgos

24 familias desahuciadas reciben ayuda municipal para el alquiler

El 30% de las solicitudes de subvención se denegaba por no cumplir los requisitos. En 2014 habrá una nueva convocatoria

Burgos

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L. B. / Burgos

Recién agotado el plazo para la solicitud de subvenciones al alquiler de vivienda para afectados por ejecuciones hipotecarias, el Ayuntamiento mantiene su empeño de recuperar la convocatoria el próximo año. Lo hará, en principio, con el mismo importe, aunque en la primera edición quedaron 60.000 euros sin destino. No obstante, fueron redirigidos con rapidez al fondo de ayudas de urgente necesidad.

Eso sí, la concejal de Servicios Sociales, Ana Lopidana, advierte de que el texto de la convocatoria podría modificarse en función de las nuevas normas de rango superior. «Tenemos que estudiar las medidas tomadas por la Junta de Castilla y León y por el Gobierno en este sentido, para no chocar con ellas o duplicar atenciones», aclara la edil.

De vuelta al pasado, Lopidana hace un balance positivo de la convocatoria de ayudas. Incluso, aprovecha para aclarar que «nadie se ha quedado fuera por tener deudas con el Ayuntamiento si cumplía el resto de requisitos».

Aunque desconoce el número de casos que se han visto en esta situación, la concejal asegura que «ha habido más de uno que se ha beneficiado de un fraccionamiento de la deuda global pendiente con Hacienda». Es más, el acuerdo alcanzado entre el particular y el servicio municipal de recaudación se ajustaba a las «posibilidades» del afectado tanto en plazo como en cantidades, «así que este aspecto no ha supuesto un obstáculo para acceder a la subvención».

Cabe recordar que el objeto de esta convocatoria era prestar ayuda económica a arrendatarios que hayan tenido que abandonar su vivienda habitual durante los años 2011, 2012 y 2013 como consecuencia de procesos judiciales de ejecución hipotecaria o extrajudicial, así como en los casos de dación en pago sin llegar a procesos ejecutivos para saldar la hipoteca. La línea de subvenciones tenía adjudicado un presupuesto de 120.000 euros.

Un total de 34 personas presentaban la solicitud. En 24 casos la respuesta fue positiva. Los beneficiarios se reparten 58.476 euros.

Las diez peticiones denegadas incumplen alguno de los requisitos establecidos en las bases que se daban a conocer en mayo en el Boletín Oficial de la Provincia. Así, en dos casos la solicitud estaba incompleta, cuatro no estaban afectados por una ejecución hipotecaria, uno no entraba en el supuesto de vulnerabilidad, indispensable para recibir esta ayuda, y otros tres ‘fallaban’ en alguno de los demás requisitos.

Sobre las ayudas concedidas, el 70% de las solicitadas, cabe detallar la nacionalidad de los beneficiarios. Y es que este aspecto constata que la población inmigrante sufre especialmente los estragos de la crisis económica, de la que se derivan los problemas vinculados de vivienda que azotan al conjunto del país y disparan la cantidad de familias en riesgo de exclusión.

Así, solo seis de los 24 perceptores de subvención son españoles. Del resto, el grueso tienen origen latinoamericano, principalmente ecuatorianos. Tres africanos y dos procedentes de Europa del este completan el listado.

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