Diez años deun triple crimen sin resolver

Burgos

Diez años después del triple crimen de la familia Barrio se mantienen las incógnitas y las dudas sobre el autor de la muerte de Salvador Barrio, su mujer, Julia Dos Ramos, y el hijo de ambos, Álvaro. Una nueva vuelta a la investigación vinculada a unas pesquisas que inició la Guardia Civil sobre Ángel Ruiz, un vecino de La Parte de Bureba, el pueblo de origen de Salvador, han dado otro enfoque a la investigación.

Pero el tiempo transcurrido y la escasez de pruebas consistentes pueden acabar de la misma manera en que se sobreseyó la causa contra el hijo mayor de la familia Barrio, Rodrigo, detenido en junio de 2007 y puesto en libertad a los siete días. Su posible implicación en los hechos se cierra con una resolución judicial del Juzgado de Menores en abril de 2010. En el auto elaborado por la juez Blanca Subiñas se decreta el sobreseimiento de la causa al considerar que los indicios aportados por la Policía son «simples conjeturas, hipótesis, elucubraciones o sospechas».

Una década después, el nombre de Ángel Ruiz se ha colocado en foco de la investigación. Este vecino de La Parte de Bureba está en prisión cumpliendo una condena de 18 años de cárcel por atropellar mortalmente a Rosalía Martínez, de 84 años, en La Parte de Bureba. Fue el 25 de agosto de 2011. Las relaciones entre Ángel Ruiz y la víctima y su familia no eran buenas. A raíz de una discusión por haber pasado Ángel por unas tierras con su tractor, este acudió a la vivienda de Rosalía, donde entró sin permiso y la amenazó. En julio de 2009, la víctima denunció lo sucedido en la Guardia Civil, aunque un año después retiró la denuncia.

Durante la investigación de este asesinato, la Guardia Civil encuentra en uno de los registros de la vivienda de Ángel Ruiz un gran número de llaves y ganzúas, entre las que está una que abre el despacho del alcalde de La Parte, puesto que ocupaba Salvador Barrio cuando fue asesinado. A ello hay que añadir que con Salvador Barrio tampoco tenía buenas relaciones. Ruiz fue condenado por un delito contra el respeto a la memoria de los muertos al ser autor de unas pintadas ofensivas contra los Barrio que aparecieron en el cementerio de la localidad burebana. Más información en edición impresa