El Correo de Burgos

Caen las ayudas económicas a dependientes mientras aumentan las vinculadas a servicios

En apenas dos años las prestaciones para cuidados familiares se han reducido en un 14%, de 3.000 a 2.593

Burgos

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L. B. / Burgos

Las ayudas económicas a dependientes mantienen el descenso progresivo que emprendían el año pasado tras los cambios en la ley dirigidos a primar las prestaciones en forma de servicio. El recorte de las cuantías y la decisión del Estado de dejar de abonar la cotización a los cuidadores desde enero de 2013 han contribuido a la caída de las prestaciones económicas al tiempo que se incrementan las relacionadas fundamentalmente con  asistencia profesional, pues las vinculadas a residencias o centros de día también han registrado caídas en los últimos dos años.

La comparación de las estadísticas que periódicamente publica la Gerencia Regional de Servicios Sociales en su espacio web constata la tendencia a la baja de las ayudas económicas. Así, mientras que en diciembre de 2012 llegaban a 3.006 en la actualidad -según los datos actualizados a 31 de julio- la cifra ha bajado a 2.593, un 14% menos. Este descenso ha recortado la proporción del total de las prestaciones que suponían las puramente económicas, antes un 30% y ahora un 25%.

En el extremo opuesto se encuentras las ayudas vinculadas a servicio, es decir, aquellas destinadas a cubrir los gastos de una asistencia cuando no sea posible ofrecerla a través de un servicio público o concertado de atención y cuidado. Este tipo de apoyos han registrado un incremento constante desde 2012, pasando de disfrutarlos 2.041 dependientes a 2.320 en la actualidad pese al descenso general de beneficiarios, lo que subraya el aumento reflejado.

Porque el de las ayudas económicas para cuidados familiares no es el único dato que se ha contraído en los últimos dos años. Y es que el total de beneficiarios con derechos a prestación reconocido también se ‘desinfla’ poco a poco.

El goteo, aunque mínimo, es continuado y la cantidad total de personas se mantiene estancada en torno a los 8.000. Los datos más recientes apuntan a 7.818 burgaleses con ayudas aprobadas mientras que en el verano de 2012 eran 8.662.

Burgos mantiene la línea del conjunto de Castilla y León con una pérdida de beneficiarios leve, lejos del total nacional -que caía en 20.000 personas solo en el primer semestre de 2014- cuyo desplome se concentra en comunidades como Andalucía, País Vasco, Comunidad Valenciana o Cataluña. Más información en la edición impresa

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