A la universidad le gusta Facebook

BURGOS

Hasta hace muy poco el tiempo dedicado a las redes sociales como Facebook o Twitter era considerado una distracción, especialmente en entornos como el laboral o el universitario, hasta el punto de que en muchas empresas y centros de formación el acceso a esas plataformas está prohibido. Pero la docencia siempre ha sido un campo abierto a la innovación, que ha ido adaptándose a los tiempos y, en muchas ocasiones, dándoles forma.

El uso de las redes sociales y otras herramientas de la web 2.0 (como los blogs, las páginas de creación colaborativa denominadas wiki o las plataformas de vídeo y foto como Youtube o Instagram) no sólo no distrae a los estudiantes sino que puede mejorar su rendimiento.

Esta es la conclusión de un estudio en el que ha participado Manuel Gil Mediavilla, profesor de la Universidad Isabel I. La principal ventaja del uso de las redes sociales y el entorno online con respecto a la enseñanza tradicional es que el estudiante «puede tomar el control y la gestión de su propio aprendizaje, fijándose sus objetivos». De este modo, «desarrolla habilidades para la colaboración, gestiona la búsqueda de información y mejora el trabajo en equipo». Estas tres habilidades en concreto son de las más demandadas en el entorno profesional, por lo que hacer un uso intensivo de las nuevas tecnologías puede suponer un valor añadido a la hora de encontrar empleo.

Por otra parte, el uso de las redes sociales también aporta un gran valor a las universidades, porque coinciden en la capacidad de difusión del conocimiento; es el caso de YouTube, en la que los canales educativos se cuentan entre los más visitados, o Scribd, una plataforma para compartir documentos, artículos de revistas o ponencias. También ha irrumpido con fuerza LinkedIn, una red social de contactos profesionales que puede servir para establecer relaciones de intercambio entre universidades situadas en distintos países.

Grupos de Facebook

Entre todas estas herramientas, la que se ha estudiado en mayor profundidad por parte de Gil Mediavilla han sido los grupos de Facebook. En concreto, las variables analizadas han sido «las propuestas de colaboración en la construcción de materiales, las respuestas a las dudas sobre los contenidos, el asesoramiento y elaboración de trabajos en equipo, la aportación de información relevante para el estudio y la profundización en los temas». El alumnado escogido ha sido el del primer curso del Grado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, y el de Dietética y Nutrición. Sigue en edición impresa