Arribas irá ‘con total disponibilidad’ y ‘confiado’ a declarar ante el juez

El Juzgado de Instrucción número 2 de Burgos emitió el pasado viernes una providencia por la que, en tres líneas de texto, cita al expresidente de Caja de Burgos José María Arribas Moral el 15 de enero para tomarle declaración «en calidad de imputado». Esta citación viene a raíz de la denuncia que presentó Unión Progreso y Democracia hace un año y medio, «por un posible delito de administración fraudulenta y desleal», tal y como aseveró la diputada provincial de la formación magenta, Rosario Pérez Pardo. Arribas está citado para el próximo día 15 de enero aunque la providencia «no especifica los indicios delictivos que han llevado al juez a tomar esta decisión», matizó Pérez.

«Me tiene que citar como imputado, no va a ser como testigo», recalca Arribas, molesto por la confusión que genera el término ‘imputado’ porque, de hecho, el magistrado está realizando diligencias previas sin haber relacionado a Arribas Moral con ningún delito. Previamente, el juez ha pedido informes al Banco de España, a CaixaBank y al FROB sobre los préstamos que Arribas mantuvo con Caja de Burgos y es ahora cuando llama a Arribas a declarar para conocer su versión.

El expresidente de Caja de Burgos explicó a este periódico que está «dispuesto a colaborar» con el juez y «confiado en la justicia» para «aclarar» las operaciones crediticias en cuestión que en todo momento «fueron legales».

La denuncia presentada por UPyD ante el Tribunal de Justicia de Castilla yLeón, señalaba que «entre los años 20005 y 2010 se habían realizado 45 operaciones de créditos, aval o garantía por parte de la entidad financiera a favor de sociedades vinculadas con el propio Arribas», explicó.

Dichas operaciones «superaban los 34 millones de euros y en un 93,8% de los casos se trataba de acciones ejecutadas por la caja de ahorros con miembros del Consejo de Administración, familiares o empresas relacionadas», aseveró la unionista.

Operaciones de crédito

Por otra parte, Pérez comentó que «supuestamente, el expresidente de Caja de Burgos también habría logrado cerrar operaciones muy ventajosas para él y sus sociedades, entre ellas Industrias Basati S.A., Tramitación de Residuos S.L. e Industrias Arlanzón S.A. (Indasa)», sociedades sobre las que «también pesa la sospecha de haber sido objeto de maquillaje contable». Arribas, por su parte, niega cualquier trato de favor e insiste en que «se ajustaron a los estatutos de la Caja y la legalidad» y fueron aprobados por el consejo de administración de forma colegiada, sin que el propio presidente participara en la votación, recalcó. Arribas Moral recordó, además, que el Banco de España ya había supervisado esos préstamos en el momento en el que Caja Sol se unió a Banca Cívica, sin que de esa inspección surgiera ninguna acción en su contra.- Más información en edición impresa