La solución para Villatoro llegará en el segundo semestre
La concejal de Medio Ambiente aseguró que ya cuentan con ofertas para la redacción del proyecto / Se construirá el pozo y se colocarán medidores
La inquietud de los vecinos de Villatoro por problemas derivados de las aguas subterráneas que están provocando grietas en algunas viviendas y humedades en los sótanos de otras tantas aumentan con el paso de los días ante la falta de acciones de arreglo por parte del Consistorio burgalés.
Tanto es así que los vecinos del barrio han vuelto a enviar un nuevo escrito al Procurador del Común para que reabriese el expediente que habían dejado en suspenso a la espera del inicio de los arreglos.
A este tenor, la concejal de Medio Ambiente, Carolina Blasco, afirmó que «se están dando pasos desde el Consistorio burgalés» y aseguró entender que «los vecinos se encuentren en tensión cuando se vive una situación como esta y más si se habla de derrumbe de casas que no tienen retorno porque no tienen cimentación».
Aunque Blasco aseguró que «es complicado dar plazos para la ejecución de las medidas» avanzó que «en la segunda mitad del año, una vez se haya redactado el proyecto en dos o tres meses, se podrán licitar y ejecutar las medidas».
«Hemos dado pasos desde que se ha conocido la gravedad de la situación pero en muchas ocasiones no pueden responder a la prisa o a la exigencia lógica que tienen los vecinos», comentó la popular.
Recordó que «se ha hecho un estudio a través del Instituto Geológico y Minero (IGME) por el que habilitaron una serie de soluciones». A partir de ahí, «se desarrolló un pliego para que se redacte un proyecto e implementar, o incluso ampliar, las soluciones que proponía el instituto».
La concejal achacó a la falta de disponibilidad de presupuesto que «no se haya iniciado el procedimiento de contratación». Ahora, «con la ofertas en la mano, la concejalía de Fomento decidirá de forma inmediata quién redactará el proyecto». Un documento que abarcará «una solución a corto plazo como es la construcción de un pozo y, a largo plazo, el establecimiento de medidores que permitirán medir los caudales de las tres cuencas para dar una solución de futuro al barrio».