El vehículo eléctrico como motor de la movilidad sostenible
Renault explica el contexto actual y futuro de este combustible a los alumnos de la Escuela Politécnica
Ernesto Salas durante su conferencia en la Politécnica.-ISRAEL L. MURILLO
«Una de las soluciones para mejorar la movilidad actual es la movilidad eléctrica», rezaba ayer el director de Relaciones Institucionales de Renault, Ernesto Salas, en una charla englobada dentro de la Semana de la Ingenería Industrial. Salas se refirió a la movilidad «porque teniendo en cuenta la explosión económica en países emergentes, difícilmente sería sostenible en el futuro con los mismo parámetros con los que se está desarrollando actualmente».
La implantación del vehículo eléctrico a nivel mundial está siendo «mucho más rápida» que la del híbrido, aseguraba Salas, si bien «las cifras de España no van a la velocidad que se pensó». Entre las razones, explicó, hay que entender que «para muchas personas es un cambio muy radical, tienen que entender las ventajas y limitaciones». No obstante, a estas alturas de su desarrollo, el vehículo eléctrico «no da soluciones a todas las necesidades de movilidad pero sí a muchas».
Unade las argumentaciones reside en el precio, más elevado que en los turismos que emplean combustibles tradicionales. Pero Salas considera que para el público «pasa desapercibido» que aunque el desembolso inicial es superior, «los gastos son inferiores». Por ejemplo, para hacer el mismo número de kilómetros, el gasto en electricidad es un quinto en comparación con el gasóleo o la gasolina, a lo que hay que sumar un mantenimiento más barato y un menor desgaste de frenos y neumáticos. Además, Salas aseguró que las ayudas de los gobiernos rebajan el precio de adquisición a un nivel semejante al de los turismos térmicos, a pesar de que en España se acusa una falta de continuidad en estas políticas.
El año pasado en el territorio nacional se vendieron 1.500 coches eléctricos, un 1,5% de cuota de mercado. «Es poco», estimó Salas, pero señaló que este vehículo «va a tener una parte de mercado perqueña, pero importante». Argumentó su pronóstico en que «poco a poco el mensaje va calando», e incluso ya hay empresas que lo están incorporando.
De cara al futuro, Salas auguró un «escenario de convivencia» en el que se irán introduciendo otros combustibles, como el hidrógeno, del que todavía hay que resolver los problemas de generación y almacenamiento.