El cinturón verde toma medidas contra las orugas

La procesionaria tiene sus días contados en el cinturón verde de Burgos. En poco más de una semana, el entorno de Fuentes Blancas y las traseras de la ladera del Castillo se librarán durante los dos próximos años de esta molesta plaga gracias a un tratamiento experimental impulsado por la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León.La endoterapia se revela como el mejor ataque contra las orugas al «evitar afecciones afecciones a las personas en una zona con un uso recreativo intensivo», indicaba ayer el jefe de la Sección de Protección de la Naturaleza de la Junta, José Ignacio Pardo, durante el inicio de una actuación que eliminará los bolsones de unos 400 pinos de ambos enclaves.El proceso se inicia con horadaciones en la parte inferior de los árboles cada 30 centímetros para, acto seguido, introducir una cánula que permita la inyección de productos fitosanitarios inocuos para el pino que se difunden por toda la copa a través de la savia. De esta forma, cuando la oruga se alimenta de la acícula, fallece al instante. Además, la endoterapia «se puede hacer en cualquier momento y no tiene condicionantes de meteorología», destacó Pardo. Por otra parte, es totalmente compatible con otras técnicas de lucha biológica como la instalación de cajas nido «para favorecer la población de aves insectívoras» o el empleo de feromonas para atrapar a los machos adultos.A pesar de sus ventajas medioambientales y la efectividad de sus resultados, la endoterapia en grandes áreas de masa forestal encarecería notablemente el presupuesto de la Administración. Por lo tanto, este tratamiento experimental se reducirá a entornos naturales frecuentemente transitados. El encarecimiento, según detallaba el técnico de la empresa adjudicataria, Alfonso Soriano, se debe fundamentalmente a los factores «transporte y tiempo», pero también al «número de pinchazos» que se realizan en el terreno.En el caso de Fuentes Blancas, donde los operarios trabajan sobre las primeras líneas de ladera, el tratamiento es rentable porque «a pequeña escala estamos equiparando los precios». Sin embargo, Soriano reconoció que si el nivel de plaga -por ahora de grado 1- aumentase «habría que tratar todo el monte con cañones».PrevenciónLa prohibición por ley de tratamientos aéreos en masas forestales salvo determinadas excepciones por motivos sanitarios conllevó a que las administraciones recurriesen a otros métodos de lucha biológica como los cañones terrestres con el condicionamiento de la orografía de las superficie y su proximidad a zonas recreativas o viviendas. De ahí a que la endoterapia se revele como el método más eficaz para no arriesgar la salud de los transeúntes.El inicio de esta campaña, que también arrancó ayer en Aguilar de Campoo, permitirá a la Junta analizar los resultados obtenidos para extrapolar este tipo de actuaciones en otras áreas de similares características. Por ello, una vez arrojadas las conclusiones pertinentes, se informará de las ventajas de este tratamiento a ayuntamientos y particulares.