El futuro de la lucha contra el cáncer pasa por las terapias personalizadas

Con motivo del Día Mundial contra el Cáncer, que se celebra mañana, la delegación provincial de la asociación española que hasta en el nombre planta cara a esta enfermedad propiciaba ayer un hecho inusual. Reunía en su flamante sede ante los medios de comunicación a tres especialistas del Hospital Universitario dispuestos a hablar sobre la incidencia en Burgos de los tres tumores más frecuentes: la neumóloga Ana Pueyo abordó las particularidades del cáncer de pulmón, el ginecólogo Alberto Tello hacía lo propio con la neoplasia maligna de mama y el digestólogo, José Luis Martín Llorente, se detenía en la realidad local del tumor de colon.

Pese a presentar diferencias notables en la aparición, los factores de riesgo o el pronóstico que presentan los afectados, el presidente de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) en la provincia, Enrique Plaza, hizo hincapié en la importancia de las investigaciones en curso para mejorar la eficacia de los tratamientos. «Es la clave», indicó. Al respecto, los facultativos coincidieron en apuntar a las terapias personalizadas vinculadas con la biología molecular como el futuro de la lucha contra la enfermedad. «Van a suponer tratamientos más dirigidos, más tolerados, con las innovaciones adaptadas a cada subtipo de pacientes», precisó Pueyo, para recordar que «globalmente vamos a asistir a un incremento del cáncer por la longevidad».

En cuanto a medios técnicos disponibles en el complejo sanitario para el diagnóstico y el tratamiento del cáncer también la opinión fue unánime. El HUBU cuenta con todo lo necesario para prestar un servicio de calidad.

De vuelta a los tumores citados cabe señalar que, en términos generales, su incidencia en Burgos ‘cuadra’ con la estimada en el conjunto del país. Así, en cáncer de pulmón se registran en torno a 80 casos por cada 100.000 habitantes y año, siendo mayoritariamente varones quienes lo padecen «aunque está aumentado la cifra de mujeres debido a la incorporación más tardía del hábito tabáquico»; el cáncer de mama suma 60 casos por cada 100.000 habitantes y es la neoplasia más frecuente en la mujer; y de colon, en 2014, se detectaron «unos 350» casos.

Adiós al tabaco

Por partes, la doctora Ana Pueyo precisó que el cáncer de pulmón es el segundo tumor más frecuente detectado en hombres y hasta hace poco el cuarto en mujeres, aunque escala posiciones. «La diferencia con el resto de tumores es que la principal labor que podemos hacer para combatirlo es la preventiva», destacó la neumóloga. En concreto: dejar de fumar. «Cuando aparecen los síntomas la enfermedad está ya avanzada. Existen eso sí investigaciones para encontrar algún biomarcador que, como ocurre en otros tipos de cáncer, nos permita sospechar a tiempo y confirmar la presencia o no de lesiones malignas mediante técnicas de diagnóstico por imagen», relató.

Hasta que eso ocurra la mejor medida es abandonar el tabaco. De hecho Pueyo vaticinó que las restricciones a este hábito en los últimos años tendrán su reflejo en la incidencia del cáncer de pulmón, que posiblemente se estabilizará en un futuro.

La mamografía, clave

Alberto Tello subrayó la importancia vital del diagnóstico precoz en el cáncer de mama. Respaldó con datos su afirmación y precisó que la supervivencia a cinco años de los casos detectados en estadio cero es del 100% y del 90% en estado 1. Sin embargo, la de los hallados en estadio 4 ronda el 20%.

En este ámbito el arma clave es la mamografía. «Es una prueba sin efectos secundarios que permite descubrir lesiones tan incipientes que ni siquiera son palpables», indicó. Añadió además que «la autoexploración tras la menstruación es importante, sí, pero en muchas ocasiones lo que se detecta está ya más avanzado de lo deseable».

Recordó que el grueso de los casos que se detectan, sobre el 60%, lo padecen mujeres de entre 45 y 65 años, más del 20% los sufren mayores de 60 y el resto, menores de 45.

Restó importancia al componente genético de este cáncer y también ahondó en la calidad de las técnicas que se emplean en el HUBU, que en 2015 detectó 215 casos y 195 en 2014, y concretó que del total casi la mitad se diagnosticaron en estadios 0 y 1.Cribado en auge

José Luis Martínez Llorente se centró en los efectos del programa de cribado de cáncer de colon implantado en Castilla y León. Ofertado a la población de entre 50 y 70 años, consiste en una analítica de heces que permita saber si hay sangre presente en ellas, lo que indicaría una lesión interna. Una endoscopia confirmaría la patología. Con el número de pruebas en aumento, el servicio de Digestivo ha logrado detectar polipos «sencillos de quitar para evitar un futuro cáncer» y también tumores precoces.

El especialista indicó que pese a que este cáncer no es excesivamente agresivo aún mueren la mitad de los casos diagnosticados. Las cifras, no obstante, «mejorarán con los avances terapéuticos».

Entre los factores de riesgo, más allá de los antecedentes familiares, el digestólogo remarcó el consumo de tabaco, alcohol y carnes rojas así como el sobrepeso.