El Correo de Burgos

SEMANA SANTA / PROVINCIA

Los jóvenes tiran del carro en la Fiesta del Judas

Más de 250 vecinos de Villadiego se implican en esta tradicional batalla entre el bien y el mal

Revisión de tropas antes de la batalla.-ECB

Revisión de tropas antes de la batalla.-ECB

Publicado por
DIEGO SANTAMARÍA
Burgos

Creado:

Actualizado:

Villadiego, como Roma, no paga traidores. Un año más, la localidad ajustició al ingrato Judas en la hoguera tras el ocaso de una jornada que arrancó al mediodía con la clásica bulla de los Cadenas en la Plaza Mayor. Con la fiesta ya en marcha, muchos miraban al cielo con la esperanza de que la lluvia no diese al traste con los actos previstos para la tarde. Y así fue, todo salió «según lo previsto», declaraba Eugenio de la Peña, del Grupo Espliego, al que ha de reconocerse el mérito de recuperar en 2002 una tradición enterrada durante décadas en el baúl de los recuerdos.Los Cadenas -el mal personificado al igual que los Miñones- dieron guerra hasta primera hora de la tarde. «Tienen aguante», confesaba De la Peña incapaz de ocultar su satisfacción por el buen hacer de los villadieguenses -sobre todo los más jóvenes- y la excelente acogida del público año tras año, lo que demuestra que la Fiesta del Judas «no es un espejismo».La extensa irrupción de los discípulos del traidor dio paso a la mítica sucesión de escenas con un Judas anónimo como cabeza de cartel. La Plaza Mayor, epicentro de la cita durante gran parte de la jornada, volvió a revivir la revista de las tropas, la chufla de la Llorona invocando al desenfreno y la innegociable orden del Rey. A continuación, las negociaciones con los sublevados en el puente del matadero y la batalla de los ejércitos en el alto de la Riba caldearon definitivamente el ambiente.Una vez entregado a las autoridades y juzgado sin posibilidad alguna de indulto, los asistentes degustaron un aperitivo a ritmo de cornetas y tambores antes de contemplar la quema de Judas ya entrada la noche. La fiesta acabó como siempre, despidiendo a su héroe y villano a partes iguales, entre fuego, luz y jolgorio a todo trapo.

el «grueso de la fiesta»Residentes o veraneantes, «cada año se apunta más gente», señalaba orgulloso de colaborar en una iniciativa que más allá de ser «una forma de pasar las vacaciones de Semana Santa» que no solo «merece la pena», sino que se ha convertido en una de las principales señas de identidad cultural del municipio.En este sentido, el actor del Grupo Espliego destacó la implicación de todas las asociaciones y recreativas de Villadiego. Especialmente el colectivo juvenil Vesánikos, una «cuadrilla estupenda» siempre dispuesta a «mejorar» lo presente y cuyos miembros «son los que llevan ahora el grueso de la fiesta».En ningún caso restaba mérito al resto de las más de 250 personas que se han involucrado en esta entrega. Todo el mundo cumple, y una vez acabada la fiesta, «la gente ya está pensando en el espectáculo del año que viene». Vale que no se pongan manos a la obra al día siguiente, solo faltaba, pero lo cierto es que las asociaciones optan por la antelación a la hora de organizar los preparativos en vez de dormirse en los laureles.Así pues, con todo un año por delante, los colectivos implicados desarrollan paulatinamente sus propias tormentas de ideas y sugerencias desde el minuto uno. Así, por norma general, la ya clásica «reunión de Navidad» marca inexorablemente la cuenta atrás.

la parrandaMás allá de la Fiesta del Judas, la asociación Vesánikos ha tirado del carro durante toda la Semana Santa. Prueba de ello es la Parranda, una «visita por las calles más emblemáticas del pueblo contando lo que se hacía antiguamente en un tono jocoso, con música y un reparto de queso y vino». La iniciativa, de estreno este año, amenaza con quedarse a tenor de la gran respuesta de los asistentes. Por ello, De la Peña confía en que el «boca a boca» también sirva para que los turistas pasen más de una noche en Villadiego.

tracking