El comercio exterior rechaza el ‘Brexit’ aunque «no sería una debacle»

El comercio exterior se reivindicaba ayer en Burgos como «elemento fundamental» para la economía del país. Así lo subrayaba Rafael Cascales, presidente de la asociación española de profesionales de este sector (Acocex), en la inauguración del VIII Congreso Internacional de Negocios y Comercio Exterior que se celebra hasta hoy en la ciudad.

Minutos antes de dar paso a las ponencias técnicas que ocuparon la primera jornada, Cascales abordaba ante los medios de comunicación un tema de actualidad con evidente impacto en el sector que representa: la posible salida del Reino Unido de la Unión Europea, es decir, el famoso ‘Brexit’.

El presidente de Acocex indicó que «esperamos que no ocurra y precisamente promulgamos lo contrario pero si los británicos deciden irse, aunque habría que adaptarse, tampoco sería una debacle». Añadía al respecto que existen estudios que vaticinan que el ‘Brexit’ recortaría un 0,2 o 0,3% el PIB español.

Con todo, insistió en que el camino «ha de ser el opuesto» y puso como ejemplo la nueva normativa aduanera, en vigor desde el pasado 1 de mayo, «que plantea la Unión Europea como un ente único». A su juicio este cambio es positivo y deberá extenderse al ámbito fiscal.

«Hay que perseguir una armonización de los sistemas europeos. No podemos olvidar que en la actualidad, tanto en geopolítica como en economía, el eje está girando hacia Asia y el Pacífico y Estados Unidos permanece en cabeza. Europa no puede quedarse atrás y para ser fuerte tiene que estar unida. Por eso somos contrarios a separatismos e independentismos», explicó Cascales, tras lamentar la poca importancia que los partidos políticos españoles otorgan al comercio exterior en sus campañas electorales.

La primera intervención de la jornada corría a cargo de Pilar Jurado, directora del departamento de Aduanas de la Agencia Tributaria. Abordó los aspectos técnicos del nuevo código aduanero de la UE, un gran cambio y el primero en este campo tras veinte años. Explicó que busca dar forma a una «aduana electrónica en la que todas las partes estén interconectadas, no solo el operador y la Administración de su país, si no las administraciones de todos los estados miembros, lo que va a facilitar mucho el trabajo».

Jurado llamaba no obstante a la calma pues «hay tiempo suficiente para adaptarse a las exigencias de la nueva normativa». De hecho, concretó que el periodo de implantación se extenderá hasta 2020 y afectará fundamentalmente a los sistemas informáticos en las administraciones y de los mensajes a transmitir por parte de las empresas.

Sobre el ‘Brexit’, la directora del departamento de Aduanas indicó que «en la actualidad el Reino Unido es el tercer país que más intercambios comerciales realiza con España». Así, «en el caso de que se tomara esta decisión «estas transacciones incluirían unos trámites de los que ahora están exentas por existir libre circulación».

El VIII Congreso Internacional de Negocios y Comercio Exterior también se detenía ayer en el impacto del TTIP. Además, ‘entregaba’ la tarde a estudiar las variables implicadas en la internacionalización empresarial.

El evento dedica su segunda jornada a una mesa de consultorías en la que una decena de expertos resolverán dudas sobre aspectos concretos del mercado exterior.

Cabe recordar que ya en la presentación de esta cita -que reunía en la ciudad a 250 profesionales- el presidente de Acocex aseguró que la tendencia al alza del comercio exterior iniciada en 2008 -a causa de la crisis y el desplome de la demanda interna- se consolida y que, además, se atisba cierta «madurez» en el tejido empresarial nacional pese a una internacionalización «tardía» por factores históricos.