El Correo de Burgos

El aumento de empresas en procesos concursales se ralentiza

Durante el segundo trimestre de 2016 son tres más que en el primero, pero su número ha descendido más de un 28% en estos seis meses respecto al mismo periodo de 2015

Unos obreros trabajan en la obra de un edificio.-ISRAEL L. MURILLO

Unos obreros trabajan en la obra de un edificio.-ISRAEL L. MURILLO

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VALERIA CIMADEVILLA
Burgos

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Durante el segundo trimestre de 2016, 13 empresas han entrado en concurso de acreedores, tres más que en el trimestre anterior, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística. Jose María Tapia, magistrado del Juzgado de lo Mercantil número 1 de Burgos, apunta que esto se deriva de la situación creada por dos grandes grupos empresariales formados por varias empresas, que harán que todavía se incremente algo más lo que queda de año. «Faltan algunas más que irán solicitando el concurso de acreedores en los siguientes meses».

A pesar del ligero aumento, la suma de estos seis meses del año reflejan un descenso del 28,13% respecto al mismo periodo de 2015. Es decir, de 32 que hubo el año pasado pasamos a 23. «Esto es debido a que vamos poco a poco saliendo de la crisis y las empresas se encuentran mejor», afirma Tapia, añadiendo que la incertidumbre política que existe en el país no es un factor de influencia directa en estos casos. «Esa falta de acuerdo para llegar a formar un gobierno tiene una trascendencia más desde el punto de vista macroeconómico y no influye directamente a lo que son los concursos». Por ello indica que, salvo este caso puntual protagonizado por estas dos compañías, la tendencia a partir del año que viene será a la baja.

Por otra parte, los 13 concursos fueron de empresas, 10 de Sociedades de Responsabilidad Limitada (S.R.L.) y 3 de Sociedades Anónimas (S.A.), siendo las micropymes -empresas de 0 a 10 empleados- de nuevo las más perjudicadas, con un total de 11, al igual que el primer trimestre del 2016, en el que fueron 7. El juez incide en que hay un cierto miedo a montar nuevas empresas, porque aunque se vea cierta mejoría «la actividad esta muy ralentizada y es lógico que la gente se lo piense dos veces antes de crear una sociedad».

El resto se divide en una de 10 a 19 trabajadores y una de 20 a 49 empleados. De todas ellas, 11 accedieron al proceso concursal de forma voluntaria y para dos fue de tipo necesario.

Asimismo el sector más afectado ha sido el de la construcción, con 6 empresas, seguido del ámbito de actividades profesionales e inmobiliarias financieras y seguros, ambos con 2 empresas, y del sector de industria, comercio al por mayor y actividades administrativas y servicios auxiliares, con una empresa cada uno.

En otro sentido, del total de empresas que presentan concurso de acreedores, la mayoría tiene más de 9 años de antigüedad -3 entre 9 y 12 años; 3 entre 13 y 16 años; 2 entre 17 y 19 años y 2 de 20 años o más- y sólo 3 son de reciente creación, hasta 4 años.

El magistrado manifiesta que ciertamente la mayor parte de empresas que llegan al juzgado llevan muchos años funcionando, porque intentan aguantar lo que pueden, buscando alternativas para no llegar a este extremo y en algún caso se producen por causas externas. «Los concursos de empresas a veces no están relacionados con su propia insolvencia, sino con la insolvencia de otras, como la de sus proveedores».

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