TROTABURGOS / LERMA
Villa señorial que enamoró a duques y reyes
El pasado barroco de la Villa Ducal se traslada al presente y futuro de la localidad para protagonizar una edición de Las Edades en 2019
La plaza Mayor de la Villa Ducal, con el parador como testigo de la celebración de la Fiesta del Barroco.-ECB
Su historia está marcada por el esplendor del Barroco que la villa vivió con el Duque de Lerma. Un pasado que se hace presente y futuro inmediato. Lerma será la sede de Las Edades del Hombre de 2019, y el Barroco uno de sus hilos conductores. Junto a ello, la más señorial de las villas del triángulo de Arlanza, buscará en este evento la promoción de los vinos de calidad que manan de sus tierras, impulsando la Ruta del Vino que lleva el nombre de sus caldos más ilustres amparados bajo la Denominación de Origen Arlanza, cuya sede se asienta en el Árco de la Cárcel que da acceso a la Villa Ducal.
Con todos estos avales, la localidad luce orgullosa su nombramiento para tan magno evento, aunque sea de cara a 2019, ya que la actual corporación municipal buscaba la designación para el próximo año.
Mientras tanto, Lerma vive sus fiestas mayores. Si el pasado 3 se desarrollaba la proclamación de las reinas de fiestas, el día 7 inicia el calendario más festivo, cargado de actividades para todos los gustos y edades. Y todo ello, con la sombra de Las Edades más barrocas de las que se han celebrado.
Y es que la capital de la comarca del Arlanza es ahora más barroca que nunca. La localidad conserva intacta su estructura barroca y celebra cada primeros de julio su fiesta, recreando el esplendor que la Villa vivió de la mano del Duque de Lerma y dando paso a un programa cultural durante todo el mes centrado en esta época pasada.
Pero Lerma es mucho más que pasado, historia y Barroco. Villa moderna y pujante la base de su economía se debe buscar en el turismo gracias a un patrimonio cultural que no deja indiferente a nadie. El pasadizo del Duque de Lerma, el Palacio Ducal, hoy convertido en Parador, el Árco de la Cárcel y sus conventos, junto a la ex colegiata de San Pedro, que será sede de Las Edades, hacen de Lerma un lugar que visitar. Y su entorno natural no desmerece al patrimonial. Sendas que se abren a una naturaleza en su máxima expresión que en el caminar se une a la Sierra de la Demanda siguiendo el caudal del Arlanza. Todo en esta pequeña pero gran villa barroca es de obligado conocimiento.