Proyecto Hombre rehabilita a 3.751 personas en 25 años

El cuarto de siglo invita siempre a festejar lo vivido y lo que queda por delante. Más aún si, como es el caso, ese tiempo se ha invertido en mejorar la existencia de miles de personas. Son ellas -su entorno y la sociedad en la que habitan- las que hacen especial la efeméride. El programa educativo terapéutico de Proyecto Hombre arrancaba el 11 de febrero de 1991 impulsado por «la necesidad de dar una respuesta humanista, solidaria y profesional» a las adicciones. Basta un puñado de cifras para dar cuenta del éxito cosechado desde entonces: 7.524 usuarios atendidos y 3.751 personas rehabilitadas.

Así resume la propia entidad el fruto de dos décadas y media de intenso trabajo en la memoria editada para la ocasión, que destaca el impacto de su labor preventiva, campo en el que han atendido a 27.512 personas desde su puesta en marcha. No obstante, la estadística solo ocupa una página de las 20 que repasan los «25 años apostando por Burgos» de Proyecto Hombre, esos que, para empezar, sintetiza su director, Manuel Fuentes, en un texto que desemboca en el mismo mensaje que subrayó ayer, en la presentación de la citada memoria: «Hay salida para las adicciones». Los datos lo demuestran, los ‘históricos’ y los recientes, que dibujan la actividad del pasado año. En 2015, Proyecto Hombre atendió a 778 personas. 453 adultos pasaron por alguno de los programas del área de inserción, 102 formaron parte de la comunidad terapéutica y 223 adolescentes recibieron apoyo directo del Proyecto Joven por encontrarse en situación de riesgo o presentar ya una dependencia. Además, en el último año 128 usuarios recibían el alta terapéutica, 44 adultos y 84 jóvenes. Así, aunque el objetivo es el mismo, el panorama actual difiere con el de hace 25 años, al igual que el presupuesto, que ha pasado de un millón de pesetas a un millón de euros. Ahora «los consumos problemáticos», antesala de las adicciones, comienzan antes, explicaba ayer Fuentes para ubicar en los 13 años la edad de inicio. «Las primeras alertas se producen a partir de los 15», indicaba en compañía de Isidoro Martín, su predecesor y actual gerente, que recordaba que en los inicios de la entidad los usuarios rondaban los 20 años. EL uso inadecuado de las nuevas tecnologías también se incorporaba en los últimos años como motivo de preocupación y para ‘combatirlo’ nacía Ariadna, un programa específico para abordar tales adicciones, presentes en el 40% de los casos que llegan por otros consumos.

También han cambiado las sustancias predominantes. La heroína marcó la década de los noventa y «en Burgos causó una verdadera epidemia», recordó Martín. La cocaína tomó el testigo y es ahora la droga ‘principal’ en el 71% de los casos atendidos en 2015, si bien no suele consumirse en exclusiva, pues se combina con otras. El alcohol y el cannabis, con un 67% y un 48%, respectivamente, ocupan los siguientes puestos en ese funesto ranking que precisamente registra un auge de la heroína en los últimos años, siendo ya la droga dominante en el 19% de los casos. «Hay quien cree que ya no existen heroinómanos. Los hay y si no están en las calles es por nosotros», afirmó Martín.

Proyecto Hombre celebrará el 21 de octubre un acto institucional en Cultural Cordón para conmemorar sus 25 años de actividad. Le seguirá una cena solidaria en el Hotel Silken que buscará además recaudar fondos para completar el presupuesto.