«Es lamentable que no nos hayan comunicado nada»

El director del Centro Nacional sobre la Evolución Humana de Burgos, Cenieh, Alfredo Pérez González, considera que las formas en las que el rector de la Universidad de Burgos, Manuel Pérez Mateos, anunció su solicitud de conversión del centro en universitario son «lamentables». «No entiendo que se comuniquen estas intenciones, que me parecen legítimas, sin tener en cuenta ni comunicarlo previamente ni al director ni a los trabajadores del centro» apuntó. Asegura no entender esta actitud que «en vez de buscar una buena relación parece buscar un enfrentamiento». Recuerda que la institución es estatal y autonómica y que «si se plantea otro tipo de relación no tengo nada que decir sino acatar lo que el Consejo decida» pero no entiende las formas.

Pérez González asegura que el interés no es nuevo y de hecho tras la ocupación del nuevo edificio la Consejería de Educación cedió un 4% de su cuota de representación en el Consejo Rector a la Universidad de Burgos. Afirmó estar sorprendido por el intento ahora que «jurídicamente dependemos del Estado» y ve poco viable esta posibilidad ya que «los intereses académicos e investigadores no tienen nada que ver con los intereses de un centro científico». Asegura no entender que se busque un convenio con el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) cuando dependen de la secretaría de Estado de Investigación. Asegura que la participación de universidades en ICTS es «poco común» y cuando se da la universidad ha estado presente en la concepción y ha participado en la financiación de la instalación. Criticó que se busque el apoyo de los codirectores de Atapuerca cuando «sólo uno está vinculado al Cenieh» pero no a los responsables de la instalación. Para Pérez González ellos son responsables «de una de las 13 excavaciones en las que contamos con investigadores principales».

La colaboración entre la UBU y el Cenieh se ha dado desde el principio de funcionamiento del centro y se materializó en un convenio que suscribieron en enero de 2011 el rector Alfonso Murillo y el entonces director del Cenieh, José María Bermúdez de Castro. Según este acuerdo, que ponía sobre el papel la relación cordial entre ambas instituciones, entre el 20% y el 40% del profesorado del Master en Evolución Humana de la UBU era del Cenieh y los investigadores de la UBU y del Cenieh podían compartir proyectos, espacios y laboratorios entre ambos centros para facilitar el trabajo de los grupos vinculados a la evolución humana.