Un broche de relumbrón

De Nueva York al Fórum Evolución, el padrino de la decimonovena edición de la Pasarela de Moda de Castilla y León, Custo Barcelona puso un broche de mil colores a la cita. Subió a escena su colección de primavera-verano 2017, bautizada Way more, en la que persigue un mensaje armónico «a partir de mucho esfuerzo»: prendas más trabajadas, cosidas completamente a mano, más riqueza en los materiales, más creatividad y una silueta más poderosa e intensa.«Es un concierto, con menos decibelios», definió el propio diseñador minutos antes de presentar sus 45 prendas de mujer y 22 de hombre. El reto de esta colección con la que la firma celebra sus 35 años en el mercado es transmitir el proyecto «a los hijos de nuestros primeros compradores».Con todo, el cambio generacional no resta ni un ápice de energía a Custo Barcelona, que mantiene su ADN, que enriquece al combinar varios materiales para crear «piezas excepcionales» con tejidos visuales sin estampaciones, lentejuelas en seda, transparencias brillantes o apliques metálicos que convirtieron su pase en toda una experiencia sensorial.Way more propone, además de mini vestidos con cintura marcada o trims de tricot, chaquetas bomber en todas sus variantes.La paleta de colores abarca mezclas de rosa pétalo y oro viejo, blanco óptico con terracotas, rosa chicle y malva: «Colores vivos mezclados a menudo con el negro en texturas brillantes que funcionan como hilo conductor».Conocedor de la evolución de la industria de la moda, el diseñador catalán indicaba al respecto que «antes lo más importante era ser creativo y ahora, sin embargo, pesa más tener la logística y el márketing adecuado». Con todo, la principal diferencia, al tiempo que el gran escollo al que se enfrentan en la actualidad para los que pelean por hacerse un hueco o mantenerse, es que «la moda está en manos de grandes corporaciones globales, unos gigantes que son los que al final son nuestros principales competidores», afirmó Custo Dalmau. Frente a ellos, la única posibilidad de «ganar pequeñas batallas» radica, a su juicio, en «diferenciarse» y saber emocionar al comprador.A ello animó precisamente a los jóvenes diseñadores que compartieron con él protagonismo en la última jornada de la Pasarela de la Moda de Castilla y León: «Hay que plantear un proyecto distinto para destacar y, además, tener paciencia, porque las cosas a veces tardan un tiempo en llegar», apostilló.