Villafría sigue en desplome mientras Ryanair ya vende billetes en Vitoria

Con un consorcio de promoción del aeropuerto que saltó por los aires por presiones políticas y unas finanzas municipales raquíticas, la oferta de la aerolínea Ryanair para volar desde Burgos hacia destinos nacionales e internacionales quedó en el aire.

Fue el aeropuerto de Foronda, junto a Vitoria, el que aprovechó la oportunidad y sacó un concurso que se adjudicó la lowcost irlandesa que ya ha empezado a vender sus primeros billetes para los vuelos que operará desde su base alavesa en primavera. Desde ese enclave conectará la capital alavesa con el aeropuerto italiano de Bérgamo-Milán y posteriomente con el de Tenerife sur. En 2018 se ha previsto incorporar dos nuevas conexiones con la capital de Rumanía, Bucarest, y Palma de Mallorca, y se prevé una quinta con el aeropuerto de Málaga para 2019.

Cinco destinos para un aeródromo especializado en vuelos de carga nocturnos que sólo abre durante el día para operar vuelos previamente solicitados, por lo que la operativa de Ryanair supone la vuelta a la vida de una instalación infrautilizada hasta ahora, pero mucho menos que Villafría.

El primer vuelo tendrá unos precios básicos en torno a los 50 euros para volar hasta las Islas Canarias, según tarifas y condiciones que la aerolínea explica en su página web, desde la que centraliza las ventas.

Ryanair se ofreció a Burgos para impulsar una operativa de vuelos similar y con las mismas condiciones económicas. El consorcio, o cualquiera de sus herederos, tendría que haber abonado cerca de un millón de euros a Ryanair que la compañía agrega a un fondo de márketing, según su propia terminología, que a modo de subvención le hubiera permitido abaratar el precio de los billetes favoreciendo el aumento de viajeros.

Pese a que Burgos fue la primera opción para esta operativa de la línea aérea irlandesa -que anteriormente había operado desde Valladolid o Vitoria- no hubo margen a la negociación en cuanto a cantidades ni los tiempos que maneja la compañía aérea con mayor tráfico de viajeros del mundo dieron la menor opción a abrir uno de esos eternos debates en el seno de las instituciones burgalesas. Un mes después de poner sobre la mesa la oferta a Burgos, los vecinos de Álava se hicieron con el contrato con Ryanair.

Burgos, en caída libre

¿Qué ha ocurrido en Villafría entretanto? Que el aeropuerto se ha encaminado con paso firme y decidido hacia el cierre técnico como instalación aeroportuaria con vuelos regulares. Hoy en día sólo los vuelos privados sostienen la actividad y las estadísticas mensuales sólo añaden gravedad a la situación.

Según los últimos datos aportados por el organismo que gestiona los aeropuertos españoles, Aena, el de Villafría sigue presentando la peor evolución de la red de Castilla y León con sólo 4.227 pasajeros transportados desde enero a octubre y 1.571 operaciones de vuelo. Hace cinco años en las mismas fechas la cifra acumulada de viajeros rondaba las 30.000 personas e iba en aumento y las operaciones de vuelo duplicaban a las actuales. Como dato significativo del declive de Villafría baste mencionar que en octubre sólo 577 pasajeros han pasado por la terminal de vuelos, lo que supone un 107,6 por ciento más que en 2015.

Evolución regional

Los aeropuertos de Castilla y León no lograron mantener durante los diez primeros meses del año el número de usuarios registrados el pasado año puesto que contabilizaron el paso de 259.240 viajeros, un 0,08 por ciento menos que en el mismo periodo de 2015. Esta evolución contrasta con el conjunto de la red gestionada por Aena, que anotó un incremento del 10,9%.

Asimismo, registraron 203 pasajeros menos hasta octubre que un año antes debido a las caídas de Burgos, León y Salamanca. Por el contrario, las instalaciones de Villanubla (Valladolid) fueron utilizadas hasta octubre por 206.951 viajeros, un 7,27 por ciento más que el año anterior, al registrar el paso de 14.034 pasajeros más.