Un viaje con ganas de volver a repetir

Era la primera vez que acudían a los campamentos de Tinduf (Argelia) para ofrecer su colaboración como sanitarios al pueblo saharahui. Y esperan regresar pronto para poder seguir aportando su colaboración, su «labor heroica», como resumió una de la expedicionarias, la enfermera Nati González, la única que ya ha estado en un lugar en el que sus habitantes, muchas veces, necesitan una ayuda que «puede paliar su alma herida».

El equipo médico que se desplazó a Tinduf estuvo formado por dos cirujanos, un internista, un anestesista, un médico de atención y primaria y cuatro enfermeras. También acudió un experto en ingeniería y arquitectura para ofrecer su aportación en las mejoras de infraestructuras. El equipo estuvo en la zona durante dos semanas, periodo en que llevaron a cabo más de 200 consultas. El traumatólogo Jaime Villanueva explicó que por las consultas han pasado muchos niños, con«alteraciones ortopédicas que aquí ya no se ven».En el caso de los adultos, algunos de los problemas que vieron fueron malas uniones de fracturas. Villanueva recordó que se realizaron 13 intervenciones.

Este médico señaló que el hospital tiene «material repetido y antiguo».En este sentido, habló de la necesidad de contar con un motor para brocas y material para poder ver las radiografías. Mario de Francisco, cirujano general, explicó que atendieron a 54 pacientes, de los que casi la mitad, un 43%, fueron por vesículas.De Francisco también planteó necesidades, como torres de laparoscopia, de las que «en los sótanos de nuestros hospitales hay torres más viejas», que podrían seguir teniendo utilidad en el hospital de Bol-la en el que desarrollaron su labor. Recordó que ya se han puesto en contacto con elColegio de Médicos para recopilar material.Su compañero Villanueva añadió que también es necesario implicar a las marcas comerciales. El anestesiólogo Rafael Barreiro destacó las maratonianas jornadas a las que se ha sometido el equipo, con días que empezaban a las 9 de la mañana y podían acabar a las 10 de la noche. Barreiro también colaboró con la asociación ‘Ojos del mundo’. Invitó a otros compañeros a sumarse a esta aventura, en la que, por cierto, hubo problemas para reclutar anestesistas. Barreiro, que hace 20 años estuvo en Bosnia, lo tiene claro, como el resto de compañeros:«Pienso repetir en el futuro porque vuelves con más satisfacción de la que llegas». La enfermera Nati González, que ya ha estado en otras ocasiones, destacó la profesionalidad de los enfermeros de allí.

El único miembro de la expedición que no era sanitario, Luis Cembranos, aporto su experiencia como arquitecto y experto en ingeniería. Mantuvo una entrevista con el ministro de Aguas y Medio Ambiente para llevar a cabo un proyecto de captación de aguas en colaboración con los el Club Rotary de Burgos.