LABORAL
Los mayores de 45 años firman dos de cada 10 empleos indefinidos
El año pasado rubricaron 1.925 contratos de larga duración, un 21% más que en 2015
Imagen de dos obreros en una obra en la capital.-SERGIO ISAR
Es el colectivo más castigado por la crisis porque llegaron al paro en edad elevada y con poca formación. También porque estaban acostumbrados a mantener aquello de ‘un trabajo para toda la vida’ y el reciclaje profesional en mayores de 45 años se convirtió así en el gran reto de los colectivos sociales, sindicales y empresariales. De ahí que los cálculos que la empresa de contratación temporal Randstad reflejan una importante inflexión en este colectivo. Aseguran que la contratación temporal en mayores de 45 años ha crecido un 36,5% desde 2006 y un 21% en el último año.
Lo cierto es que 2016 ha marcado un punto de inflexión en la contratación.Dos de cada diez contratos indefinidos que se han suscrito en la provincia están protagonizados por mayores de 45 años. Es un colectivo que protagonizó 1.925 de los 11.356 empleos indefinidos que se firmaron a lo largo del año pasado. De total de indefinidos firmados, 982 tuvieron que realizar contratos temporales previos. Así 223 recibieron la estabilidad tras haber suscrito un contrato laboral por obra o servicio y 678 se reinsertaron en el mercado laboral con un contrato eventual por circunstancias de la producción que se transformó en indefinido, según las cifras delServicio Público de Empleo (Sepe). Otra de las fuentes de las que bebe la contratación transformada en indefinida para mayores de 45 es de los contratos de interinos, 40 se volvieron estables y 25 personas discapacitadas con empleo temporal encontraron también la estabilidad en 2016. La contratación directamente indefinida para este colectivo llegó en 2016 a 943 personas.
La evolución en la contratación de trabajadores con este perfil ha pegado un cambio de 180 grados. En 2006 rozaba casi el pleno empleo, especialmente en hombres vinculados al sector de la construcción. De esta manera sólo 263 contratos temporales se transformaron entonces en indefinidos del total que lo habían hecho ese cambio (1.704). La principal contratación en este colectivo era directamente indefinida ya que, según Radstad, aquel año firmaron un contrato indefinido a 1.410 burgaleses, de los que 1.200 fueron directamente indefinidos. De esta manera se incrementa un 36% la contratación indefinida en el colectivo más envejecido de trabajadores pero protagonizaban seis de cada diez contratos estables en la provincia. Esta realidad es fiel reflejo de que la variabilidad de contratos, la mayor parte de ellos, temporales, que han dejado lo que los sindicatos llaman inestabilidad mientras que los empresarios hablan de adecuación a las circunstancias de la producción.La temporalidad se ha adueñado de la contratación que ahora es más elevada. Respecto al año pasado, la conversión en indefinidos de los empleados mayores de 45 años creció un 21%. Entonces se habían suscrito 1.589 contratos en esta horquilla de edad, previa a la jubilación. Esto supone que solo 1,6 de los indefinidos generados aquel año estaba protagonizado por mayores.
«Los profesionales mayores de 45 años cuentan con habilidades y competencias que se adquieren principalmente a través de la experiencia y que cada día son más demandadas en el mercado.Estamos hablando de la comunicación eficaz, de la capacidad para resolver conflictos, la capacidad de adaptación, la negociación, la orientación a resultados o el trabajo en equipo», señala la directora nacional de RandstadOutplacement, Helia Téllez, en una nota de prensa. Insiste en que «en determinados puestos las empresas valoran más los perfiles de más edad porque no solo aportan conocimiento profundo del sector, imprescindible para obtener resultados, sino porque son capaces de capitalizar y compartir el conocimiento con las generaciones más jóvenes».