Morenito de Aranda deja impronta en Arles y pasea un trofeo
El burgalés despliega su mejor versión frente a una exigente corrida de Pedraza de Yeltes

Morenito de Aranda en la plaza de toros de Arles.-ISABELLE DUPIN
Morenito de Aranda arrancó con fuerza ayer su temporada en la plaza francesa de Arles frente a una brava y exigente corrida de Pedraza de Yeltes. Oreja y vuelta al ruedo para el torero arandino que puso entereza y resolución frente a un buen lote. Alternó con Iván Fandiño que dio un golpe de autoridad, cortando dos orejas y saliendo a hombros; y el valenciano Román que saldó el compromiso con ovación y silencio. La plaza se cubrió en más de la mitad de su aforo.El burgalés dio la cara desde el principio. Su primero fue un ejemplar de Pedraza de Yeltes que desarrolló buen tranco y nobleza. Toro de interesante juego y aplaudido en el arrastre. Morenito se explayó con él tanto con el capote como con la muleta. Corrió bien la mano, toreó con suavidad y limpieza sobre ambos manos, revistiendo las tandas con airosos remates a modo de trincheras, cambios de mano y largos pases de pecho. Le faltó acertar con el acero. Al no hacerlo, el premio quedó reducido a una vuelta al ruedo.Al que sí le cortó el trofeo fue al cuarto, un importante animal que tomó tres puyazos y embistió con nobleza, sobre todo por el pitón izquierdo, que fue por donde la faena del burgalés tomó consistencia. Buen toreo al natural de Morenito que metió al público en la canasta. Esta faena se la brindó al propietario de la ganadería de Valverde y Concha y Sierra y la primera al público.A hombros salió un gran Iván Fandiño tras cortar una oreja a cada ejemplar de su lote. Extraordinaria su primera faena, de gran entidad. Brillante con el capote y hundido sobre ambas manos con la muleta, ciñéndose con el toro y logrando momentos de intensa profundidad. Necesitó utilizar la cruceta por lo que cortó un único trofeo. Otro cortó del quinto, un toro noble que tuvo menos poder que el resto de la corrida pero al que Fandiño extrajo muletazos bellos.Cumplió el valenciano Román que pasó en blanco por Arles. Se aplomó el primero de su lote y anduvo afanoso frente al sexto pero su labor nunca acabó de tomar vuelo.