Los burgaleses podrán proponer inversiones durante el mes de junio

Participativo de verdad. Así será el presupuesto municipal de 2018. Al menos esa es la intención que el alcalde de la ciudad, Javier Lacalle, trasladaba ayer al Consejo Social. Minutos antes de que comenzara la reunión, el primer edil detallaba que tal y como establecen los compromisos alcanzados por el equipo de Gobierno con PSOE y Ciudadanos «colectivos, asociaciones y burgaleses a título particular podrán decidir el destino de un 20% del montante total de inversiones».El plazo para remitir las propuestas comenzará la semana que viene y se prolongará durante todo el mes de junio. En este tiempo, entidades de toda naturaleza y ciudadanos que lo deseen podrán comunicar sus aportaciones al presupuesto bien por «vía telemática, bien de manera física, en los buzones que estarán instalados en todos los centros cívicos» en ese periodo.En concreto, Lacalle explicó que la herramienta informática que permitirá recoger las sugerencias online -labor que coordinará el servicio 010- ya está lista para funcionar. También están elaborados los modelos en papel que acompañarán a los citados buzones. «En ellos se detallarán los distintos ámbitos a los que se puede destinar la aportación, tales como vías públicas, equipamientos de todo tipo o la red de aguas, por ejemplo», indicó, para insistir que el objetivo es que «haya la máxima participación posible».De lograrlo se encargarán las áreas municipales de Participación Ciudadana y la de Hacienda. Tras la recogida de ideas durante el mes de junio, las primeras semanas de julio se dedicarán a estudiar todas las propuestas recabadas.«Los servicios técnicos analizarán la viabilidad de las mejoras que se reclaman para tener las aportaciones ajustadas en la segunda quincena de julio, de tal forma que podamos trabajar en verano para tener configurado en septiembre el documento que después, en el último trimestre del año, tendrán que analizar los distintos grupos municipales», relató el primer edil.

Compartiría después este plan con los integrantes del Consejo Social de la ciudad, órgano consultivo que además de analizar esta fórmula conoció los detalles del plan estratégico de turismo. Tal y como se anunció la pasada semana, en la presentación elaborado por los técnicos municipales, este documento «importantísimo para el futuro de Burgos», según subrayó Lacalle, estará listo en julio para aprobarse en septiembre.Por su parte, la concejal de Imagina Burgos, Blanca Guinea, criticaba que «lo único que nos hemos encontrado es una propuesta somera del alcalde, que pretende habilitar una especie de ‘buzón’ para recoger sugerencias a la elaboración del el presupuesto». Lamentaba la edil no haberse encontrado con «una documentación específica sobre este procedimiento» y recordaba que «el proceso de elaboración de los presupuestos es una tarea compleja, no se trata de que la gente haga sugerencias porque para eso ya está la Comisión de Dudas y Sugerencias, no hay ninguna diferencia entre esto y el planteamiento del alcalde para la elaboración de los presupuestos». Recordaba que en el año 2015 , «ya planteamos a Lacalle un procedimiento de debate y de análisis de propuestas dentro de los diferentes consejos sectoriales, que desoyeron».Debate sobre la ciudadPrecisamente en este sentido, Guinea explicaba que, durante la reunión, el grupo recordaba al alcalde, el planteamiento desarrollado por los grupos de la oposición sobre la celebración de un Pleno Extraordinario para debatir el estado de la ciudad. «El planteamiento no difiere mucho de un Pleno Ordinario por lo que le planteamos una serie de elementos innovadores para que verdaderamente sea un altavoz real de la ciudadanía».La propuesta pasa porque «de aquí a septiembre se convoquen de forma continua todos los consejos sectoriales para que los colectivos puedan hacer una reflexión sobre el estado del ámbito en que se centran, sin embargo el alcalde quiere adelantarlo al mes de julio porque en otras administraciones este foro se realiza en ese mes, pero no hay ninguna norma que obligue a que así sea». Esa información «se remitiría al consejo social y «dentro de este órgano se elegiría de un representante del mismo, que participaría en igualdad de condiciones que los concejales».Del mismo modo, para dar voz a aquellos ciudadanos que no se encuentran en estos consejos sectoriales «hemos pensado en la creación de unas pequeñas encuestas para que nos den su opinión». La información recogida a través de este canal «se remitiría tanto al seno del Consejo Social como a la Corporación municipal». Para lograr un inclusión plena de todos los ciudadanos Imagina plantea que «el debate sea retransmitido a a través de lengua de signos» y que la cita «se desarrolle en un espacio más grande fuera del Salón de Plenos, para que puedan acudir los ciudadanos que lo deseen».Guinea aseveraba que «el alcalde se ha mostrado en contra de la propuesta» y calificó de «falta de respeto hacia los colectivos y los ciudadanos». Aseguraba que «Lacalle sigue agarrado a su sillón y no quiere soltarlo ni para debatir sobre cómo se encuentra la ciudad».Considera que «al alcalde no le gusta el debate cara a cara, donde le digan las cuestiones de la ciudad que se hacen mal o que son mejorables» ya que «prefiere la vía telemática, el plasma».A pesar de la negativa del alcalde, el grupo aseguraba que seguirán insistiendo y tratarán de llevar a cabo la propuesta «a través de nuestros propios medios y esperamos al menos conseguir que se desarrolle en un espacio más amplio y contar con un intérprete».