Rajoy aboga por trabajar unidos para conseguir «un sector fuerte»

El presidente del Gobierno Mariano Rajoy abogaba ayer por el trabajo conjunto del equipo de Gobierno, las formaciones políticas y los agentes sociales para lograr «un sector industrial fuerte y generador de empleo». Lo hacía en el marco de las jornadas organizadas por UGT, ‘La industria en España. Reflexiones’, que se clausuraron ayer en la capital burgalesa, a la que llegaba unos minutos después de la una de la tarde. En el foro, al que acudió acompañado por la ministra de Empleo Fátima Báñez, el presidente de la región Juan Vicente Herrera, y la presidenta de la Cortes de Castilla y León Silvia Clemente, Rajoy apostaba por tres retos clave para lograr el crecimiento de la industria.En primer lugar señalaba la importancia de que el sector se sume al reto digital de la industria 4.0. «La introducción de las tecnologías digitales en todos los ámbitos del tejido productivo es un elemento crítico para competir». Por otra parte y sobre el sector energético, el presidente del Gobierno aseguraba que es necesario «tomar decisiones responsables y equilibradas» que, cumpliendo con los objetivos medioambientales y de penetración de la nuevas tecnologías renovables, «ayuden a la industria a ser más competitiva».Apuntaba como clave «evitar que se genere déficit energético como consecuencia de decisiones políticas, estamos comprometidos a no subir los costes regulados» y añadía que «seguiremos apoyando programas específicos de eficiencias industrial y, por primera vez, los Presupuestos Generales del Estado recogen partidas para reducir los costes de las industrias electrointensivas».En tercer lugar, Rajoy recordó, respecto a una política industrial específica, que «estamos poniendo en marcha un marco estratégico integrador de todos los elementos relevantes como la digitalización, la empleabilidad y la innovación», que va «acompañado por una estrategia de impulso a la industrias donde las pymes también deben ser protagonistas».El sectorEl presidente del Gobierno recordaba en su intervención que nos encontramos en un momento «de crecimiento económico», que llega «tras cinco años de recesión y de destrucción de empleo sin precedentes» y aseguraba que ese buen momento se traducirá en «un crecimiento de la economía del 2,7% durante este año» y que permitirá «la creación de medio millón de empleos».En este contexto de recuperación, el jefe del Ejecutivo nacional apuntaba que «España y su sector industrial deben ser capaces de afrontar los retos de la globalización». Un sector que «actualmente supone el 14% del empleo y el 16% del PIB nacional», aunque recordaba que el objetivo compartido con la UE es «alcanzar el 20% en 2020». El sector industrial, aseveraba, «ha contribuido al crecimiento de la economía española y es que, mientras que en 2011 de España salían bienes industriales por valor de 18.000 millones de euros al mes, ahora la cifra supera los 23.000 millones».También «ha mejorado el empleo en la industria» y es que «ya se han recuperado casi 275.000 empleos perdidos durante la crisis en el sector y llevamos 36 meses consecutivos de incremento de la afiliación».UGT demanda al Gobierno un pacto de Estado para la industria«La representación de la industria en el PIB de esta región pone de manifiesto hasta que punto es necesario reivindicar un pacto de Estado sobre el sector».Con estas palabras iniciaba su intervención en las jornadas sobre industria organizadas por UGT, su secretario general, Pepe Álvarez, quien aseguraba que «no es fácil que nuestro país recupere sus niveles de empleo y salarial y alcanzar las cuotas de bienestar que hemos tenido en el pasado, si no hacemos una fuerte inversión en la industria». Álvarez abogaba por «la normalidad» y «tendía la mano» al Gobierno para «sentarnos a trabajar y concluir con acuerdos en materia industrial».El sindicalista aseguraba que «el país está saliendo de la crisis ‘macroeconómicamente’» y añadía que «este es el momento de caminar sobre unas bases solidas de futuro, entre las que se encuentra la industria, y no sobre pies de barro». Para ello , Álvarez apostaba por la «reindustrialización del sector», para lo que invitaba al Gobierno a «reconvertir el gran acuerdo estratégico por la industria que salía de las congreso de UGT en un pacto de Estado transversal, con la implicación de las fuerzas políticas, a través de una subcomisión de Industria en el Congreso de los Diputados, que pueda analizar el sector y sacar conclusiones y hacer propuestas».Entre los problemas del sector y en materia energética, solicitó «un acuerdo estratégico que permita al país tener una energía de acuerdo con sus posibilidades», que «no renuncie a la energía nuclear segura», pero que «no olvide la importancia de las energías renovables». En definitiva. UGTsolicita «un mix energético que garantice un precio razonable y calidad razonable para suministrar energía a las empresas».Otro inconveniente es «el tamaño de las empresas españolas». Una problemática para la que apostaba por «la relación universidad - empresa como clave» y es que «tenemos que hacer un esfuerzo porque la formación dual nos permitiría afrontar un proyecto industrial con éxito».Sobre la fiscalidad, Pepe Álvarez recordaba que la industria «no es un sector que especula sino que invierte y cuyos dividendos tienen que ver con el esfuerzo inversor que hace» y abogaba por «tener en cuenta a aquellos que trabajan décadas y décadas por contribuir también a la riqueza colectiva, que es la que tiene futuro».