Conde cree que los botellones en la UBU no son solo una cuestión policial
Apuesta por mantener una reunión «técnica» con la Universidad para abordar el problema
El pasado miércoles, el secretario general de la Universidad de Burgos, Miguel Ángel Iglesias, reclamaba a Policía Local y Policía Nacional una intervención «más activa» a efectos de evitar que el campus se convierta en un espacio de botellón. «Son ellos quienes deben actuar», afirmaba y recordaba que la UBUse ha puesto en contacto con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, el Ayuntamiento de Burgos y laSubdelegación del Gobierno y «ha autorizado el control, el seguimiento y la actuación policial dentro del campus si fuera necesaria».A tenor de estas declaraciones, la concejal de Seguridad Ciudadana, Gema Conde, confirmaba que el rector de la entidad académica envió una carta al alcalde de Burgos pidiendo apoyo policial y autorizando su entrada en caso de necesidad, pero entiende que «este es un asunto complejo que debemos abordar de manera global y conjunta».De ahí que la edil pregunte a la Universidad en qué momentos y de qué forma requieren una presencia policial. «Sería conveniente que precisaran si quieren presencia policial constante en el campus o solo de una manera puntual», comentó y añadió que, a su parecer, «no sería positiva una asistencia policial constante en el campus, no solo como imagen, sino que además dudo que pudiera resolver los problemas que tienen en este aspecto».Para determinar los pasos a seguir, la popular ofreció «una reunión técnica» a la Universidad porque «se trata de un asunto delicado que merece una reflexión más profunda».
En la ciudadEl botellón no es solo una práctica universitaria y es que cada fin de semana, cientos de jóvenes se reúnen en diversos puntos de la ciudad para beber. A nivel general, el Mayor de la Policía Local, Félix Ángel García, explicaba que «el botellón ha salido del casco antiguo, pero se ha diseminado a otras partes de la ciudad» y recordó que «del botellón no va a desaparecer únicamente con presencia policial, quien así lo piense está equivocado».En este sentido, la concejal de Seguridad Ciudadana, añadía que «se trata de un planteamiento global, que no solo requiere una intervención policial, sino que necesita actuaciones desde otras áreas que sean capaces de generar planes y programas alternativos de ocio saludable». Alternativas que «ya se han tratado en reuniones entre Policía Local y las áreas de Sanidad y Juventud».El Parral o la calle Venerables son las zonas más frecuentadas por los jóvenes para beber aunque «también acometemos actuaciones en supermercados para que otros jóvenes