Protección Civil se propone ‘recuperar’ los cien voluntarios

Para la agrupación local de voluntarios de Protección Civil el año recién estrenado será sinónimo de crecimiento. En varios sentidos, además. Ayer se consumaba el que experimentará el espacio municipal que ya ocupan. Y es que el propio alcalde, Javier Lacalle, decretaba ceder a la entidad 250 metros cuadrados más del inmueble de la calle Juan de Padilla en que se encuentra su sede.

Así, sus instalaciones pasarán de 400 a 650 metros cuadrados de superficie, un estirón del 70% que, de entrada, les permitirá reubicar distintas zonas y incrementar el tamaño del aula de formación. De esta forma, para actividades con gran asistencia «ya no tendrán que trasladarse a las dependencias de la Policía Municipal o el cuerpo de Bomberos», destacó Lacalle.

Similar aumento confía experimentar la agrupación en su número de integrantes. Tras un año sin convocatoria de acceso y con un ‘plantilla’ de 83 voluntarios, el objetivo es que el próximo proceso de selección -que comenzará después de Semana Santa para culminar en junio- permita ganar una treintena de efectivos y recuperar al menos los cien.

«Lo ideal, no obstante, sería llegar a 120, cifra que en otros momentos hemos alcanzado», señala Carlos Sainz de Lomas, responsable de este servicio que achaca a un 2017 sin incorporaciones lo ajustado del número actual: «No hemos podido cubrir los puestos que, por motivos personales de los voluntarios que los ocupaban, han ido quedando libres en los últimos dos años».

Con esta situación a punto de resolverse y a punto de iniciar la ‘expansión’ en sus instalaciones, 2018 promete y es posible que permita incluso elevar una actividad que ya en el ejercicio pasado fue intensa. La agrupación local de voluntarios de Protección Civil llevó a cabo en ese periodo un total de 332 servicios, «siendo el mes de junio el que más labor supuso, con 52, un 15% del total», relató el alcalde, para detallar que además de la «clásica» atención a los peregrinos que recorren la provincia de Burgos, «pues estos voluntarios no trabajan solo en la capital», «también están presentes en concentraciones masivas de gente vinculadas a acontecimientos y actividades de todo tipo».

A estas intervenciones ordinarias a demanda de los colectivos o instituciones organizadoras de las distintas citas se sumaban en 2017 hasta nueve llamamientos urgentes motivados por sucesos, tales como desapariciones de personas, o inclemencias meteorológicas.

En suma los integrantes del equipo realizaron 10.164 horas de trabajos, una media de 129 horas por cabeza. Y eso que «no llegamos a todo y hay solicitudes de apoyo que tenemos que rechazar», explicaba ayer Sainz de Lomas, satisfecho, eso sí, con la ampliación: «Realmente necesitamos más espacio para mejorar nuestro trabajo».

En concreto, el alcalde detalló que los 250 metros cuadrados ganados exigirán reordenar la distribución actual. «El reacondicionamiento implicará más comodidad, contar con una sala de formación adecuada y una sala de juntas más grande y, también, incorporar taquillas para todos», explicó el regidor, para explicar, eso sí, que este decreto se ciñe exclusivamente a la cesión de la superficie y no se acompaña de dotación presupuestaria alguna para subsanar las deficiencias que, reconocía, existen en el inmueble. Para ello habrá que esperar por un plazo de momento indefinido.

Recordó no obstante que Protección Civil cuenta con medios técnicos como siete vehículos -tres todoterrenos, una furgoneta y tres quad- y 8 desfibriladores, 5 adquiridos recientemente.