Una comisión vigilará el desarrollo de las obras de la Plaza Mayor

La nueva junta directiva de la Federación de Empresarios del Comercio (FEC) de Burgos mantuvo ayer una reunión con el alcalde, Javier Lacalle, y la concejal de Comercio, Carolina Blasco, en la que se acordó crear una comisión de seguimiento de las obras de la Plaza Mayor. «El objetivo es analizar la evolución de la obra, cómo afecta a los negocios y que se resuelva cualquier cuestión sobre la que surjan dudas», señaló al respecto la edil de comercio, Carolina Blasco. Señaló que el objetivo es que el contacto fluido entre ambas partes «minimice el impacto de la obra sobre los negocios». La propuesta del alcalde es convocar reuniones cada quince días o cada semana en función de lo que se estime necesario en cada momento.

«Había preocupación entre los comerciantes de la zona por saber cuándo y por donde se iban a iniciar las obras, creo que esta comisión de seguimiento facilitará que haya una buena comunicación para saber qué se va a hacer y cuándo y no pille a los comerciantes y hosteleros de la zona desprevenidos», señala la presidenta de la FEC, Consuelo Fontecha. Para aprovechar la ocasión los representes de la FEC han solicitado que se incluya la fibra óptica soterrada «ya que van a abrir el subsuelo nos permitiría contar con prestaciones tecnológicas que el comercio necesita para actualizarse y que, en el caso de la fibra óptica, el Plan General no permite que el cableado sea aéreo con lo que hay zonas especialmente en el centro que no disponen de este servicio», explica Fontecha.

Está previsto que los trabajos de repavimentación de la plaza se inicien en febrero pero se hagan por la zona cercana al Palacio de la Diputación Provincial para continuar, posteriormente, por la calle Sombrería hasta alcanzar la Plaza Mayor. Los trabajos, que realizará la empresa Construcciones Ortega por 2,1 millones de euros y 15 meses de ejecución, se han planteado en fases para minimizar la afección a comercios y establecimientos de hostelería. Esta reunión entra dentro del plan previsto para el inicio de los trabajos en la que también se han abordado cuestiones relacionadas con la carga y descarga.

El encuentro ha permitido a Lacalle y Blasco presentar la nueva propuesta de mejora de la eficiencia energética de los comercios. El objetivo es que el comercio de proximidad pueda «minimizar su huella de carbono a la vez que mejorar la eficiencia de sus negocios», señala Blasco. Para desarrollar una estrategia se presentará en los próximos días un estudio de la situación energética de los comercios de la ciudad. «Somos uno de los grandes consumidores de energía después de la industria y tenemos que ser lo más eficientes y menos contaminantes posible y para lograrlo lo primero es conocer la situación en la que estamos», añadió Fontecha.

Mientras tanto ambas partes analizarán el desarrollo del plan de Apoyo al Comercio de Proximidad que puede «apoyar los cambios que se están produciendo en el sector», explicó Blasco. El encuentro se ha garantizado la continuidad de las subvenciones finalistas que el comercio recibe dentro del plan y se realizará un análisis del ejercicio de 2017 para arrancar con el de 2018. Un proyecto en el que se plantea potenciar el trasvase del comercio hacia las nuevas tecnologías. «No podemos hablar de horarios y pensar solo en cuánto tiempo abrir sino en el servicio que ofrecemos, no debemos tener miedo a las nuevas tecnologías sino utilizarlas para el mejor funcionamiento de nuestros negocios porque nuestros consumidores lo demandan», señaló la presidenta de la FEC.

En el encuentro se han tratado otros asuntos como la proyección de Burgos como ciudad de compras además de gastronómica. La reunión fue «correcta y agradable» y permitió a los comerciantes presentar a su nueva presidenta, Consuelo Fontecha, tras varios años de impass tras la renuncia de su antecesor, Enrique Bañuelos.