El 85% de los turistas senior opta por España y Castilla y León es su tercer destino favorito

Poner el foco en el comportamiento del turismo senior, de mayores de 60 años, es clave porque es un público objetivo en permanente expansión y con unos intereses muy concretos donde Burgos tienen muchas capacidades de desarrollo. Es una de las conclusiones de la intervención del director de Comunicación y promoción de Viajes El Corte Inglés, Fernando Tomás Ginés, quien, en una distendida intervención aseguró a los presentes que «aunque parezca que el panorama senior no vive un momento favorable la realidad es que en 2050 el 54% de la población mundial serán mayores de 60 años». Un perfil que para la oferta turística burgalesa, basada en el patrimonio, la gastronomía y la cultura, tiene un buen acomodo. «El turista senior tiene más tiempo libre, con lo que se puede aprovechar cierta desestacionalización de sus visitas, un presupuesto fijo ajustado a sus ingresos, y tienen ganas de vivir nuevas experiencias, buscan un ocio activo con un nivel de gasto superior a la media», señaló Tomás Ginés durante su intervención ante más de un centenar de invitados.

Un tipo de público objetivo al que podría dirigirse la oferta burgalesa puesto que Castilla y León y su turismo patrimonial y cultural se sitúa como la tercera opción dentro de los viajes senior por el país. Los viajes nacionales son la opción más socorrida para este colectivo. En concreto el 85% eligen destinos nacionales donde preceden a Castilla y León como destinos principales Comunidad Valenciana y Cataluña. «Burgos y Castilla yleón tiene mucho que hacer con este tipo de turismo para quien, además del sol y playa, el 25% también busca escapadas urbanas» explicó Tomás Ginés durante su intervención en la Jornada sobre Turismo: ‘Bienvenidos a Burgos’ organizada por EL CORREO DE BURGOS e Ibercaja.

Pero para el responsable de Comunicación de Viajes El Corte Inglés hay cuestiones pendientes en promoción. «Cuando veo anuncios institucionales hay fotos bonitas, elementos patrimoniales inmejorables pero les falta producto, experiencias concretas al estilo producto experiencia más hotel x días... Es importante incluir un precio en los anuncios institucionales porque, por lo que vemos en nuestra agencias, tiene buenos resultados», explicó.

Otro de los handicaps que observa en la publicidad turística institucional, en este caso en la oferta de turismo cultural, es la reserva en la programación «por miedo a la competencia de ciudades próximas». Para Tomás Ginés es un error. «Una de las claves es informar a los touroperadores de la programación, si saben que van a tener un encuentro o un festival guardárselo es un error, hay que ponerlo en valor». Añadió también la oportunidad de ver a las provincias o ciudades vecinas como amigos en vez de como enemigos. «Sería positivo crear ejes culturales reconocidos, interrelacionarse y programar de forma conjunta con lo que el esfuerzo de comunicación y promoción se suaviza. ¿Porqué no unir la oferta cultural del Liceo de Barcelona, el Teatro Real de Madrid y el Campoamor de Oviedo?»

Apunta que el turismo cultural, uno de los puntales para los visitantes seniors, está en regresión «según los expertos». Para superarla, el responsable de Viajes El Corte Inglés añadió cuatro claves más para crecer en este tipo de producto turístico. «Poner en valor a los pequeños museos que permitan enriquecer la oferta de los grandes y más conocidos». Otra de las líneas es la de «crear producto y cuantificarlo». Apunto la necesidad de transmitir una y mil veces y no sólo con anuncios sino con reportajes los productos culturales existentes en cada lugar. «Hay que transmitir lo que tenemos, generando información, hablando con ello en la prensa, en la radio es la manera de captar ventas» además de crear ejes geográficos culturales reconocidos.

Este tipo de turismo, explicó, tiene muchas ventajas porque «hace al visitante sentirse bien, realizado..., aprendes». Y es uno de los elementos que el 37% de los turistas internacionales tienen en mente para elegir destino. «Burgos debería planteárselo como un producto estrella porque tiene oferta y es un negocio muy rentable que compite con sol y playa». Mueve millones de dólares a través de visitas a monumentos, museos, festivales, conciertos y que no es nuevo. Desde el siglo XVII se practica este tipo de turismo en Europa conFrancia,Italia, Reino Unido y España como destinos principales. Iniciativas en las que «instituciones públicas y empresas privadas debemos trabajar para impulsarlo».

Este es uno de los paquetes que más interés tiene para el turismo senior. Los mayores de 60 años buscan calidad más que precio y paquetes confeccionados donde todo esté listo antes de salir. Un ámbito en el que empiezan a imponerse los paquetes avanzados frente a los paquetes básicos. De esta manera se ofrecen productos diferentes «basados en experiencias singulares».

Tomás Ginés empezó a explicar, para sorpresa de muchos de los asistentes que llenaron la sala de conferencias de Cajacírculo en Plaza España, una serie de viajes singulares que pueden llevarle desde un viaje en un Buque de Carga donde «los containers esconden un lugar para dar charlas de cocina, pintura y además de pagar el viaje se colabora en las tareas del buque». Un tipo de producto que ofrecen pocas navieras, sólo el 1% de los buques de carga permiten como máximo entre cuatro y 12 pasajeros. Los cruceros, uno de los productos con mayor demanda enEspaña, tienen en el país su inicio o su bautismo en el Puerto de Barcelona, el tercero en cruceros del mundo y el primero del Mediterráneo.

Aunque también hay otros paquetes singulares como los viajes de voluntariado por el crecimiento personal, los viajes genealógicos que se han generalizado mucho en Estados Unidos y Canadá para conocer el origen de sus antepasados en Europa o incluso organizar encuentros entre familiares lejanos.

También hay viajes específicos para solteros y viudos ya que el 10% prefiere vivir sus experiencias en solitario. «En el turista senior, además, hay una tendencia a viajar solo, crear lazos por afinidades en el viaje y volver a hacer otro conjunto». Y junto a los viajes culturales y religiosos empieza a tomar cuerpo y presencia los denominados viajes de misterio. «Hasta el momento de facturar en el aeropuerto el viajero no conoce el destino al que va a viajar, como mucho el día antes le llaman de la agencia para el tipo de ropa que va a necesitar». Otros son viajes en los que los participantes deben resolver un misterio, donde los mismos viajeros interpretan el rol de un personaje. «El turista senior no tiene miedo, le gusta la sorpresa quiere conocer, disfrutar y vivir experiencias», reflexionó al respecto Fernando Tomás Ginés quien señaló las propuestas organizadas desde El Corte Inglés con El Club de Vacaciones de los 60 donde «se donan cantidades para acciones sociales y, por ejemplo, se organizan viajes para 50 personas de entre 70 y 80 años que por diversas circunstancias no habían viajado y es una experiencia bonita».