La deuda media de los inquilinos morosos supera los 4.000 euros

Los inquilinos morosos de Burgos son los que más dinero deben de la región, de media, a sus arrendatarios. Así lo indica el estudio elaborado por el Fichero de Inquilinos Morosos, presentado esta misma semana, que cifra en 4.169,17 euros, el montante pendiente de pago en la provincia. El dato supera con creces al del sus vecinas, pues León, en segundo lugar y tras un fuerte incremento superior al 9%, apenas supera los 3.600 euros. Muy cerca se ubican los 3.560 euros de Segovia y los 3.518 de Salamanca, deudas medias alcanzadas también tras notables aumentos anuales, en torno al 6% en ambos casos.

Con todo, si bien Burgos destaca negativamente en términos absolutos en la citada estadística, por ser la provincia con más cuantías impagadas, de media, a los arrendatarios, cabe significar que ocurre todo lo contrario con la variación interanual de tal indicador, con un descenso del 2,66%. Se desmarca así tanto del resto de territorios próximos como los ya indicados, al ser el suyo un caso único en Castilla y León, como del auge regional, por encima del 3,5%, y nacional, próximo al 4%, entre el ‘subidón’ del 12% en Melilla y el desplome cercano al 7% de Baleares, comunidad que pese a todo duplica el importe medio de la morosidad en arrendamientos de Burgos, con una deuda acumulada de 8.234 euros.

El informe en cuestión no desentraña las razones de cada tendencia provincial de la morosidad en este ámbito. No obstante, sí se detiene en los llamativos descensos registrados en 2017 en Baleares y Cataluña, donde la deuda cayó un 2.76%. El documento vincula este movimiento «al progresivo desplazamiento del arrendamiento residencial tradicional en favor de los alquileres turísticos, con apenas casos de impago». Habida cuenta del auge de este mercado, especialmente en la capital burgalesa y para crispación de los hosteleros, podría entenderse que la singular evolución de la morosidad local también se ha visto influida por este fenómeno.

No obstante, otras bajadas, como las de Asturias y Ceuta, de un 2% en ambos casos, se achacan «a sus pequeños mercados de arrendamiento, donde las rentas son bajas». A la luz del incremento reciente del precio del alquiler cuesta creer que este sea el escenario burgalés aunque precisamente por este hecho las operaciones se han frenado en los últimos meses.

Por otra parte, aunque la provincia destaque en Castilla y León por lo que deben de media sus inquilinos morosos, con sus 4.169 euros lejos de los 3.489 del conjunto regional, la comparativa con el resto del país la otorga un puesto más cercano a las comunidades que ocupan los últimos puestos de la tabla. Es decir, hasta doce autonomías arrojan un importe medio de la morosidad superior al burgalés y solo siete están por debajo.

Madrid lidera la clasificación con el impago más elevado, de 9.717 euros, un 59% más que la media nacional. En el extremo opuesto figuran Extremadura, con 3.307 euros de deuda, y Castilla y León, con los casi 3.500 ya mencionados.