Punto de encuentro entre quienes buscan empleo y retener el talento

Llega a la tercera planta del Fórum carpeta en mano. Ya sabe, por la web, qué empresas de las que le interesan estarán presentes en el XVII Foro de Empleo de la Universidad de Burgos. Sus primeros años de universidad quedan lejos. En 2015 terminó la carrera de Biología que estudió en Salamanca. Posteriormente hizo un máster en Criminalística en Barcelona que terminó el pasado mes de noviembre. «Ahora trabajas en lo que vas encontrando pero de lo que he estudiado no». La cita acogió la presentación de 6.636 currículums para 549 propuestas de empleo.

Yolanda, junto a otros tantos, está esperando su turno frente a Agrolab, uno de los stands estrellas en la nueva edición del Foro de Empleo dado su proyecto de expansión en Burgos. Yolanda tiene esperanzas. «Hice prácticas allí y viendo la ampliación en la que van a entrar en Burgos creo que puedo aportar frescura. Me gustaría porque además es de los pocos sitios donde apuestan por los científicos que hoy en día no estamos muy bien valorados aquí», señala.

En la misma cola, cerca está también el stand de Asti y Alucoil, también muy concurridos, están Jorge y Víctor. El primero acaba de terminar Ciencias Ambientales en la Universidad de León y «me quiero dedicar al tema del medio ambiente, mientras tanto hago cursos ahora estoy en uno de consultor técnico en truficultura y aquí vengo a buscar una oportunidad». Su amigo Víctor, que ha estudiado Ingeniería Agroalimentaria en la Universidad de Burgos, ha encontrado un hueco para «ver si nos dan una oportunidad». Como sus compañeros no se queda con los brazos cruzados. Tras licenciarse ha cursado un máster en la Escuela de Ingeniería Agraria de Palencia y se encuentra en pleno proceso de preparar su defensa del Trabajo de Fin de Máster (TFM).

Estos son algunos de los perfiles altamente cualificados que buscan su oportunidad entre las 450 ofertas concretas de empleo que han puesto sobre la mesa de los 95 stands de otras tantas empresas reunidas en el Foro de Empleo de la UBU. No son los únicos. Muchos han abandonado la universidad hace tiempo, otros tantos buscan «mejorar mi puesto actual». Un cita abierta a todas las enseñanzas y personas de todas las edades que persiguen estabilidad laboral.

El objetivo es «poner en contacto a empresas con demandantes de empleo y viceversa», señaló en la inauguración del encuentro el rector de la Universidad de Burgos, Manuel Pérez Mateos. Una de las novedades son las presentaciones en siete minutos que se han estado preparando en la Universidad de Burgos. «Les hemos entrenado en como expresar lo mejor de sí mismos en siete minutos y ver cómo vender su curriculum», explicó Mateos.

La iniciativa registra un incremento de ofertas y empresas en búsqueda de trabajadores. «Este año se presentan 95 empresas frente al año pasado que fueron 65 en una cita que nos ayuda a movilizar al máximo la economía», explicó el rector en la inauguración de la cita en la que estuvo acompañado por el consejero de Empleo, Carlos Fernández Carriedo. Un estímulo que se nota en la Unidad de Empleo de la UBU en los últimos tiempos. «Ayer mismo se ofertaron 30 plazas en el portal de empleo de la Universidad», explicó al respecto Mateos.

Un encuentro en el que colaboran económicamente el Banco Santander y el Ayuntamiento de Burgos. El concejal de Juventud, José Antonio Antón, resaltó el esfuerzo del Consistorio que invierte tres millones de euros en diferentes políticas de empleo «dentro del área social y de juventud».

EN BUSCA DE TALENTO

Para las empresas el objetivo final es el de captar talento, principalmente joven, para poder definir su carrera profesional en la propia compañía. En esta línea se enmarca el programa Dual de la Universidad de Burgos que estrenó la factoría Benteler, otro de los grandes focos de atracción para la entrega de currículum ayer. De los estudiantes que empezaron este programa de formación desde segundo curso en los perfiles demandados todos han entrado formar parte de su organigrama laboral excepto uno de los estudiantes que se marchó al extranjero. Un mismo programa en el que está inmerso Asti Tech Group. La empresa de robótica está inmersa en un ambicioso proceso de formación en el que han incorporado en el programa dual de la UBU a cuatro alumnos del Grado de Informática y dos del doble grado de Derecho y ADE. Son alumnos de segundo, tercero cuarto, en función del grado, que asumen «formación técnica, cada uno en su rama, y soft relacionado con comunicación, liderazgo y orientación al cliente», señala el técnico de recursos humanos presente en la feria de la UBU, Víctor Citores. Destaca que en este programa y en otros programas con diferentes tipos de formación se persigue que «ellos puedan desarrollarse en la empresa y que nosotros podamos cubrir nuestras necesidades empresariales».

Un mismo plan de carrera en el que están inmersos en Desmasa, que afronta con tranquilidad su futuro tras los cambios en Hiperbaric, o Lear que acaba de cumplir su primer aniversario en Burgos. «Somos una empresa pequeña y vamos incorporando personal poco a poco, lo que nos gusta es, siempre que contamos con posibilidades en nuestra oficina técnica, ir tutorizando o formando a los que acaban de ingresar en plantilla en un modelo en los que una persona con experiencia forme a uno más joven», señala el responsable de recursos humanos de Desmasa, Aitor Vicario. «Siempre estamos buscando talento, formarlo y retenerlo para ello buscamos personas que se ajusten a una formación técnica, también perfiles de mecatronia, con idiomas y que sean polivalentes porque los proyectos son muy diferentes entre sí», destaca.

El idioma también es clave, importante, en Lear. «Buscamos desde ingenieros a trabajadores de producción con idiomas, especialmente para ingenieros e informáticos, y que estén disponibles para trabajar fuera de España», resumen desde Lear.

El objetivo de todos ellos es captar talento, cualificado y con al menos dos idiomas. Yolanda, Jorge y Víctor podrían ser sus candidatos. Aunque muchos podrían acercarse a Secot, la oficina del egresado emprendedor donde «tratamos de darnos a conocer pero no hay tradición de emprendimiento en el mundo universitario», explica Pedro Sáinz. Por ello se plantean un «trabajo a largo plazo a dos o tres años para que tengan en cuenta otra posibilidad, el autoempleo». Pero siempre con garantías por ello ofrecen asesoramiento para comprobar la viabilidad de un idea empresarial.