El Correo de Burgos

El PP defiende su negociación con los hosteleros para salvar las tapas

El PSOE e Imagina califican de «cacicada» y de «irresponsable» no haber votado unas nuevas bases

Una cocinera prepara las tapas en una caseta en una imagen de archivo.-RAÚL G. OCHOA

Una cocinera prepara las tapas en una caseta en una imagen de archivo.-RAÚL G. OCHOA

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N. E. / Burgos
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La propuesta de feria de tapas que presentaba ayer el equipo de Gobierno en una dación de cuentas durante la reunión del consejo ejecutivo del Instituto Municipal de Cultura (IMC) volvió a levantar polémica entre los grupos políticos que están muy lejos de entenderse en este asunto. De hecho, había convocadas dos reuniones del IMC una ordinaria en la que el concejal de Festejos iba a presentar el resultado de las negociaciones con 16 hosteleros interesados en montar 19 casetas y otra extraordinaria, forzada por los grupos de la oposición (PSOE, Imagina y Ciudadanos) con el único punto en el orden del día de hablar sobre la feria de tapas pero con el planteamiento de los socialistas de sacar unas nuevas bases.El resultado de ambas citas se tradujo en un intercambio de acusaciones. Así, el concejal de Festejos, José Antonio Antón, achaca a los socialistas la responsabilidad de que se haya tenido que negociar ‘in extremis’ para salvar la cita gastronómica que va a distar del modelo que se venía realizando hasta ahora dado que el organizador propiamente dicho no será el Ayuntamiento.Y por su parte el PSOE e Imagina firmaron un comunicado conjunto considerando la propuesta del equipo de Gobierno como «una cacicada» que va a acabar con la feria definitivamente. Califican de «irresponsable» el modo de proceder del Partido Popular y achacan a la portavoz del grupo, Carolina Blasco, la negativa a someter a votación la propuesta consensuada de poner en marcha unas nuevas bases.Para Antón la situación actual «no es la deseable», pero aseguró que su intención siempre ha sido que se celebre la feria de tapas. «Si ponemos en una balanza siempre será más positivo que las fiestas tengan esta convocatoria a que simplemente desaparezca», aseguró tras el consejo del IMC. Cargó contra los socialistas que han estado «jugando» a crear el problema y después a erigirse como los que han propiciado la solución. Según indicó, «solo buscan ponerse la medallita» y aseguró que a estas alturas de junio era «inviable» sacar unas nuevas bases someterlas a concurrencia pública, presentar unas tapas, el concurso y distribuir las casetas. En este sentido, Antón recordó que las casetas hay que empezar a montarlas 10 días antes de las fiestas y, por tanto, este año que empiezan más tarde como mínimo desde el 18 de junio debería empezar la instalación.Desde el punto de vista del PSOE e Imagina, las nuevas bases daban unas garantías de seguridad y calidad. «A pesar de que el PP asegura que el tiempo corría en contra todo ha sido propiciado por la inacción del equipo de Gobierno dado que los técnicos afirman que sí hay tiempo aún para proponer unas nuevas bases, por lo tanto lo que falta es voluntad política», añaden.En resumen y como ya ha publicado este periódico, un grupo de 16 hosteleros están interesados en montar 19 casetas en cuatro ubicaciones (paseo de Atapuerca, plaza de la Libertad, plaza de España y plaza de Santo Domingo). Solicitarán de manera individual permiso para ocupación de la vía pública para montar la caseta, tendrán libertad para poner los precios de las tapas y para arreglar o no las casetas.

Esa autorización lleva implícitos diversos condicionantes en relación con los requisitos de seguridad y los suministros que los hosteleros deberán cumplir para conseguir el permiso en cuestión que concede la presidenta del IMC, Lorena de la Fuente. Esos planes de seguridad, según aseguró Antón, podrán ser compartidos con los que tenga que elaborar el Ayuntamiento que es el que programa la música en las plazas donde hay feria.Por cierto, que la autorización conlleva el pago de la tasa de ocupación de vía pública, un pago que representa el inicio de la polémica ya que los socialistas consideran innegociable el pago y los hosteleros eran quienes se mostraban en contra. La tasa que sí se pagará ahora será de 360 euros por los diez días de fiestas.Esta opción de ocupación de vía pública será compatible con la instalación de seis gastronetas que sí formalizaron su inscripción antes del 11 de mayo cuando acaba el plazo de presentación en las bases que salieron a concurso. Así lo confirmó Antón, que señaló que se ubicarán en Alonso Martínez y en Santocildes. Los empresarios que instalen food truck deberán participar en la animación de la vía pública, en opinión de Antón, en la misma línea que lo harán los empresarios que pongan caseta. Con este tipo de organización «individualizada» ahora mismo es posible que si hay algún hostelero interesado podrá todavía presentarse.El concejal de Festejos se preguntaba si es que el PSOE no quería feria de tapas este año y reclama que «dejen de poner palos en las ruedas». De cara a próximos años, planteaba ayer la opción de dejar en manos de la Federación de Hostelería la organización de la feria tal y como también se ha propuesto este año.

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