Salinero critica que solo se ejecutó el 73% del presupuesto de 2017

Los concejales no adscritos vinculados a Podemos, RaúlSalinero y Blanca Guinea, criticaron ayer las cifras de la Cuenta General de 2017 por la escasa ejecución presupuestaria y porque, en su opinión, los burgaleses no obtienen los servicios que merecen de acuerdo a los impuestos que pagan al Ayuntamiento.Ayer se celebraba la comisión especial de cuentas en la que se informaba de los resultados presupuestarios de 2017, un año marcado por la aprobación del segundo plan económico financiero de la etapa del actual alcalde, Javier Lacalle. «La deuda subió por encima del 110% al tenerse que hacer cargo el Ayuntamiento de la reestructuración de la deuda de los consorcios en lugar de buscar que se compartieran responsabilidades con las cajas que eran socias de los consorcios y obligó a redactar un plan que significa que Burgos debe dar cuentas a la Junta de sus movimientos», manifestó Salinero.Más en concreto el edil no adscrito lamentó la escasa ejecución del presupuesto que apenas llegó al 73% y denunció que el equipo de Gobierno «venda» a la ciudadanía una buena gestión por las cantidades que quedan en los remanentes de un año al siguiente. Añade que los remanentes que se usan para inversiones en el siguiente ejercicio tienen como consecuencia una baja ejecución del gasto previsto en el año anterior. Según asegura, «esto indica que los contribuyentes reciben menos de su Ayuntamiento que lo que aportan porque no se ha gastado lo previsto en inversiones». En su opinión una buena gestión supondría ejecutar entorno al 90% del presupuesto y precisa que Burgos está a la cola de los niveles de ejecución con respecto a otras capitales de Castilla y León.Como ejemplo Salinero indicó que en el capítulo de inversiones del presupuesto de 2017 se quedaron sin invertir cinco millones de euros que podrían haberse destinado a actuaciones como la mejora de instalaciones deportivas municipales y culturales.Por su parte, el concejal de Hacienda, Salvador de Foronda, opinó que los datos de ejecución del presupuesto de 2017 son buenos teniendo en cuenta que se retrasó su entrada en vigor. Según recuerda, cuando estaban aprobadas las cuentas hubo que redactar un plan económico financiero que tuvo que aprobar la Junta de Castilla y León. «Apenas tuvimos el presupuesto en vigor cinco meses y lograr ejecutar el 73% con la cantidad de inversiones que estaban comprometidas es un éxito», asegura De Foronda, que indica que hay que ver las cosas en perspectiva.El responsable de Hacienda señala que el plan económico financiero ha permitido utilizar los remanentes para ejecutar inversiones tanto en 2017 como en 2018 e insistió en que se contemplan proyectos de carácter plurianual como El Plantío o el puente de las Rebolledas que se irán pagando a medida que lleguen las certificaciones.