INFRAESTRUCTURAS
Arranca la nueva pasarela con el vallado y demolición de estribos
El objetivo es que en las primeras semanas de noviembre se pueda empezar a levantar la nueva
Una máquina perfora el terreno en el entorno donde se ubicará la pasarela-ISRAEL L. MURILLO
Aunque algunos vecinos del Crucero tenían alguna duda, los trabajos ayer en la zona de la pasarela sobre la BU-11, centrados en el vallado de toda la zona afectada por obras, despejó todas las dudas. Un cartel ya avisada el fin de semana pasado de la prohibición de aparcamiento por el inicio de las obras. Los primeros trabajos se han centrado en el desarrollo de un vallado de la zona afectada por obras que es más amplia dado que para cumplir con los volúmenes de accesibilidad universal la actuación va más allá de un puente. Y siguieron, de forma inmediata, con la demolición de los estribos de la antigua estructura.
La empresa encargada de las obras, Viales y Obras Públicas, confía en que en las primeras semanas del mes de noviembre se pueda iniciar la construcción de los nuevos estribos de la futura Pasarela del Crucero. Algo que se producirá dos años después de la retirada, de un día para otro, de la antigua pasarela sobre la BU-11. Dos años que 500 vecinos de la barriada de los Ríos y el área de García Bezoya llevan ‘aislados’ del otro lado de la ciudad. Varios operarios se encontraban ayer por las inmediaciones de la zona de obras, que se ha ampliado, al mismo tiempo que lo hará la nueva infraestructura que contará con 105 metros desde el acceso norte y otros 55 metros en el acceso sur de la calle Ángel María Bedolla.
Precisamente estos problemas de accesibilidad echaron para atrás un primero diseño de la pasarela que sustituyera la vieja construida hace casi 40 años. El primer proyecto de IDEAM-INES tenía que estar listo para el mes de enero de 2017 con el objetivo de reducir el plazo sin la estructura en servicio, puesto que su retirada se dio de un día para otro ante la pérdida de un 50% de la resistencia de la estructura, en cuyo interior corría el agua, y que pudo detectarse en una inspección técnica.
Esa discrepancia del proyecto inicial de la Dirección General de Carreteras obligó a detallar un nuevo proyecto que se presentó en enero de este año, con más de 365 días sin pasarela. La adjudicación del proyecto también se dilató en el tiempo. Se presentaron hasta 19 empresas y, tras elegir adjudicatario, hubo que resolver el periodo de alegaciones de los concurrentes. De ahí que el inicio de las obras se haya demorado.
La actuación supone una inversión de 554.422 euros y las obras tienen un periodo de ejecución de cuatro meses con lo que los trabajos, si se cumplen los plazos, estarían listos para el mes de febrero.
El proyecto, además de la pasarela contempla la construcción de un muro de contención junto a la calzada BU-11 donde se apoya la viga de la pasarela.El proyecto también prevé el reacondicionamiento de unas escaleras existentes a la altura de la calle de los Ríos y, en ese mismo entorno, bajo una rampa de 55 metros, se construirá una zona ajardinada. En el lado de García Bezoya está previsto un nuevo paso de peatones y en la calle Carcedo una nueva acera.