La ocupación hotelera en el puente de Todos los Santos alcanzará el 85%

Los hoteles de la capital burgalesa esperan una ocupación cercana al 85% en el puente de Todos los Santos, aunque no en los cuatro días, sino del viernes al sábado que «son los días más potentes del puente», tal y como apunta presidente de la Federación de Empresarios de Hostelería de Burgos, Luis Mata, quien añade que «el jueves y el domingo la ocupación muere y cae hasta el 60%».A pesar de todo, los datos son mejores que en el años 2017 y es que «el año pasado no podría hablarse de puente porque el 1 de noviembre cayó en miércoles y la gente no tiene tantos días», explica. En cualquier caso y sin tener en cuenta cancelaciones de última hora, este puente- al contrario que otros- no dependerá de la climatología. Y es que «muchas de las personas que nos visitarán estos próximos días tienen familia en Burgos y muchos vienen a rendir homenaje a sus parientes fallecidos».Si hay un puente que genera buenos resultados en la capital burgalesa es el de El Pilar. «Es una fecha con mucha fuerza, por norma general el tiempo acompaña y el Camino de Santiago sigue teniendo mucho tirón». Esas características unidas a «unos precios tremendamente competitivos y ajustados» favorecieron una ocupación del 100%.Precisamente un precio «asequible y popular» es el que «permite mantener el turismo en la capital burgalesa», tal y como explica Mata, que asegura que los precios de Burgos «siguen siendo unos de los más bajos de todo el territorio nacional y ahora también de Castilla y León». Actualmente una habitación en un hotel de cuatro estrellas en el centro de la ciudad y en fin de semana «tiene un precio medio de 60 euros», explica el presidente de la federación, quien asegura que «pocas ciudades tienen sus precios tan ajustados».De cara al puente de la Inmaculada, Mata cree que los datos de ocupación serán mejores que en 2017, por la misma razón que lo serán los del puente de Todos los Santos. «El puente cae de jueves a domingo mientras que en 2017 los festivos cayeron en miércoles y sábado». Eso sí, el nivel de ocupación estará condicionado por la climatología, especialmente por la presencia o no de nieve. «Si hay nieve muchas personas prefieren apostar por zonas de montaña para ir a esquiar o a hacer snowboard», explica el presidente, que recuerda que «dependiendo del tiempo pueden producirse más o menos cancelaciones de última hora».Así las cosas y a falta de dos meses para que finalice el año, el presidente de la federación califica de «malo» el 2018, con «una caída de las pernoctaciones de entorno al 7%», que «no es aún mayor gracias a las ofertas y los precios ajustados».Turismo ruralEn cuanto al turismo rural, las casas rurales de la provincia prevén una ocupación del 75%, tal y como explica Francisco Hernansanz, presidente de la Asociación de Turismo Rural de la Provincia de Burgos (Turalbur). La ocupación será mejor que en 2016, «último año en el que hubo puente, porque el año pasado no se puede considerar que lo hubiera». En aquel momento, la ocupación fue del «65%».En cualquier caso, los datos no serán mejores que en el puente de El Pilar cuando las casas rurales alcanzaron una ocupación del 90%. En este sentido, Hernansanz asegura que «si el segundo semestre se cierra con los mismos resultados que el primero, estaremos hablando de una mejoría respecto al año anterior».Una mejoría en la ocupación, que el presidente de Turalbur achaca a una leve mejora de la economía. «Los turistas que hace unos años hacían tres salidas rurales al año hubo un tiempo que las redujeron a una o dos, mientras que los que hacía una o dos, dejaron de hacer turismo rural, ahora se está recuperando ese movimiento inicial».Eso sí, el perfil del turista rural sigue siendo nacional- en un 90% de los casos- «especialmente de las comunidades de Madrid, País Vasco, Cataluña y la propia Castilla y León», apunta Hernansanz, quien espera «poder mejor en la atracción de turistas de otros países».