La plantilla de la cárcel traslada su reivindicación a las familias de los internos

La protesta de los funcionarios de prisiones concentrados en el exterior del centro penitenciario burgalés coincidió ayer con el acceso de los familiares de los internos, por lo que los manifestantes aprovecharon la ocasión para trasladarles las circunstancias que ahora mismo padece la prisión de la capital, además de su propia situación laboral. Los horarios de visita habían sufrido modificaciones por parte de la dirección de la prisión debido a la huelga de sus funcionarios. El portavoz de la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias en Burgos, Valentín Gómez, explicó que las familias respondieron de manera positiva y aceptaron la información de buena manera, debido a que las reivindicaciones, en el caso de ser aceptadas, supondrán también mejoras para los internos, explicó.

Gómez señaló que «por parte de la administración no ha habido ningún guiño», por lo que tan sólo queda «esperar» a que «responda». A pesar de que la esperanza es lo último que se pierde, o eso dicen, a este grupo de funcionarios no les queda mucha, ya que «de momento, con las declaraciones del ministro no hay esperanza», concluyó el portavoz.

PARTICIPACIÓN

El Gobierno cifró en casi un 44 por ciento el seguimiento de la huelga de los trabajadores de instituciones penitenciarias ayer en las prisiones de Castilla y León. Según informó la Delegación del Gobierno, fueron 25 los efectivos que secundaron la huelga, todos ellos personal funcionario, de los 337 efectivos total, lo que supone un 43,86%. A nivel nacional el seguimiento durante el turno de mañana de este domingo fue de 361 trabajadores, también en su mayoría personal funcionario, con un respaldo al paro del 67,48 por ciento. Por comunidades autónomas, los mayores seguimientos se registraron en Canarias, donde fue total el paro; en Castilla-La Mancha, con un apoyo del 95,65 por ciento; o en Murcia, donde alcanzó el 88,89 por ciento.

Según informaron los sindicatos a través de un comunicado, que recoge Ical, en la prisión de Topas (Salamanca) se registraron algunos incidentes debido a las amenazas de agresión de uno de los visitantes a varios trabajadores del centro, una postura que no fue secundada por el resto de familiares. Los hechos tuvieron lugar debido a que los familiares de los internos no pudieron celebrar las comunicaciones habituales dado que no habían sido informados por la administración penitenciaria del conflicto en los accesos a los centros penitenciarios por la jornada de huelga.

Ante esta situación, los responsables sindicales lamentaron la tensión que se está generando “en todos los centros penitenciarios”, algo de lo que culparon a la actitud del ministro del Interior, que está demostrando «un desconocimiento total y absoluto» de la institución penitenciaria, lo que a su vez está haciendo que el conflicto «se recrudezca» y que cada día haya «más trabajadores que se suman a las medidas de presión».