Los distintivos medioambientales de la DGT crecen hasta los 2.500
El etiquetado no es obligatorio aunque sí recomendado por parte de Tráfico
El distintivo de color azul se aplica en vehículos eléctricos e híbridos con más de 40 kilómetros de autonomía.-ECB
Cada vez son más los vehículos que circulan por la provincia con el etiquetado medioambiental puesto que la cifra se ha elevado hasta los 2.500 respecto a los 1.400 que transitaban hace menos de un mes, lo que supone un incremento de unos 1.000 distintivos y el desarrollo de un territorio más sostenible. Estos permiten identificar a los vehículos más respetuosos con el medio ambiente permitiendo el acceso a los centros urbanos en períodos de contaminación a aquellos calificados como ecológicos. La clasificación e identificación de los vehículos matriculados en función de las emisiones facilita la incorporación de criterios medioambientales en la gestión del tráfico. Su origen reside en el ‘Plan AIRE’, puesto que recoge la clasificación de los vehículos en función de los niveles de contaminación que emiten.
La presente actualización del ‘Plan AIRE 2017-2019’ está considerando otra serie de medidas respecto a las tratadas en el anterior plan que finalizó en 2016. Se pretende reducir los niveles de emisión a la atmósfera de los contaminantes más relevantes y con mayor impacto sobre la salud y los ecosistemas, así como fomentar la información disponible en materia de calidad del aire y así fomentar la concienciación de la ciudadanía.
De manera paralela, la bicicleta como medio de transporte urbano es cada vez más una firme propuesta prácticamente en todo el mundo de cara a un mayor desarrollo sostenible. Su integración en la ciudad supone un desafío que abordar desde el punto de vista de la Seguridad Vial, de cara a poder circular de forma segura y aprovechar todas las ventajas de este medio. De ahí que el actual plan incluya un PlanEstratégico Estatal de la Bicicleta. La propia DGT será la encargada de coordinar e impulsar su desarrollo y funcionamiento.
Para ello, buscarán la colaboración de los representantes de las administraciones públicas y de los grupos sociales y económicos relacionados con el fomento de la bicicleta. El plan se encuentra actualmente en proceso de elaboración y su publicación está prevista para el 2019.